/ sábado 29 de mayo de 2021

Así vivieron | No hay campaña electoral perfecta

Faltando 9 días para la jornada electoral del 6 de junio, los candidatos en sus cierres de campaña van a dejar lo que les resta para poder convencer a los indecisos y puedan competir para llevarse el lugar privilegiado que con el voto la gente elige.

En los más de 50 días de elección quienes buscan una curul en la Cámara de Diputado o los candidatos a las alcaldías o el Congreso del Estado que a más del mes están en la promoción del voto, acelernado sus eventos y abarcando más horas al día para recorrer y saludar al ciudadano, para completar su agenda y en sí asegurar llegar posicionados al día esperado.

En estos días de campaña, los candidatos se presentaron con la ciudadanía, explicaron sus propuestas y están en estos momentos solicitando el voto.

También aparecieron un sin número de encuestas arrojando los resultados tan diversos como numerosos también son los clientes que esas empresas encuestadoras entre reconocidas como ‘patito ‘y es ahí la duda en general de quienes son en sí los punteros; la guerra de las encuestas, se generaliza y ante los resultados en la elecciones anteriores se termina por descalificar, ya que el prestigio de esas empresas demoscópicas terminan en el momento que los resultados electorales se dan a conocer y donde los candidatos que lideraron en campaña terminan perdiendo.

Sobre los mismos días de campaña, la otra parte de las competencias electorales se da al interior de los comités mismos, principalmente en los de los candidatos a alcaldes, sus integrantes están más preocupados por mantenerse en el ánimo de su jefe o sea el candidato que en ver cómo le suma votos a su líder; los pleitos con el jefe de campaña, con los dirigentes del partido, los asesores, los fiscalistas, el encargado de hacer la agenda, que decir con los asistentes que están con el candidato y todos los que integran ese staff que se pelean el futuro laboral en esos 45 días de campaña intensa.

Si en ese pleito al interior entre los organizadores por buscar asegurarse en ese juego de poder y ambición, se le suma un agregado más, la familia del candidato que por encima de las decisiones ya tomadas entre los organizadores, cambian y deciden porque son la familia; las historias de intrigas, malas decisiones, ridículos y donde incluso el mismo candidato es sobajado por la esposa o ninguneado por algún vástago es común y donde los resultados sí se ven en el reflejo de los votos.

Así son las campañas, donde si bien, podemos ver candidatos que sudan la camiseta en pleno sol, o quien busca plazas públicas para saludar a quien esté o también al candidato de fotografía ese que sube a sus redes dos o tres fotografías saludando y sonriendo en alguna calle, para justificar su trabajo y que no hace campaña, manteniendo su bajo perfil.

Por el lado, los partidos políticos, sus dirigentes en campaña administran además de las prerrogativas, están en la conveniencia de ver qué candidatos tienen la posibilidad de competir con un buen resultado y los que por los efectos no prendieron, a esos les retiran apoyos y buscan negociar con los candidatos punteros de los otros partidos las listas de militantes para asegurar posiciones políticas o dinero para beneficio personal.

El día de la jornada electoral, tras los resultados, tres expresiones se conjugan en los protagonistas y sus equipos, quienes ganaron, las alegrías y el festejo no se hace esperar al saber que por el esfuerzo se consigue la victoria.

En contra parte los perdedores, externando fraude y rodó en las boletas, exigiendo a los órganos electorales claridad y culpando a a su equipo de los errores de la campaña, el candidato que sabiendo desde antes de iniciar que estaba perdido en la inercia de sus seguidores busca los medios de difusión para argumentar y sorprender a la ciudadanía.

La tercera es quien obtuvo un empate en la elección y que le corresponde a un tribunal electoral decidir el resultado ese sin duda es quien la angustia se la lleva a los siguientes días de la elección, tan desgastantes y lleno de optimismo hasta saber la resolución.

jvela@elsoldetampico.com.mx

fb: Jorge Vela Villarreal

@jorgevelavi

Faltando 9 días para la jornada electoral del 6 de junio, los candidatos en sus cierres de campaña van a dejar lo que les resta para poder convencer a los indecisos y puedan competir para llevarse el lugar privilegiado que con el voto la gente elige.

En los más de 50 días de elección quienes buscan una curul en la Cámara de Diputado o los candidatos a las alcaldías o el Congreso del Estado que a más del mes están en la promoción del voto, acelernado sus eventos y abarcando más horas al día para recorrer y saludar al ciudadano, para completar su agenda y en sí asegurar llegar posicionados al día esperado.

En estos días de campaña, los candidatos se presentaron con la ciudadanía, explicaron sus propuestas y están en estos momentos solicitando el voto.

También aparecieron un sin número de encuestas arrojando los resultados tan diversos como numerosos también son los clientes que esas empresas encuestadoras entre reconocidas como ‘patito ‘y es ahí la duda en general de quienes son en sí los punteros; la guerra de las encuestas, se generaliza y ante los resultados en la elecciones anteriores se termina por descalificar, ya que el prestigio de esas empresas demoscópicas terminan en el momento que los resultados electorales se dan a conocer y donde los candidatos que lideraron en campaña terminan perdiendo.

Sobre los mismos días de campaña, la otra parte de las competencias electorales se da al interior de los comités mismos, principalmente en los de los candidatos a alcaldes, sus integrantes están más preocupados por mantenerse en el ánimo de su jefe o sea el candidato que en ver cómo le suma votos a su líder; los pleitos con el jefe de campaña, con los dirigentes del partido, los asesores, los fiscalistas, el encargado de hacer la agenda, que decir con los asistentes que están con el candidato y todos los que integran ese staff que se pelean el futuro laboral en esos 45 días de campaña intensa.

Si en ese pleito al interior entre los organizadores por buscar asegurarse en ese juego de poder y ambición, se le suma un agregado más, la familia del candidato que por encima de las decisiones ya tomadas entre los organizadores, cambian y deciden porque son la familia; las historias de intrigas, malas decisiones, ridículos y donde incluso el mismo candidato es sobajado por la esposa o ninguneado por algún vástago es común y donde los resultados sí se ven en el reflejo de los votos.

Así son las campañas, donde si bien, podemos ver candidatos que sudan la camiseta en pleno sol, o quien busca plazas públicas para saludar a quien esté o también al candidato de fotografía ese que sube a sus redes dos o tres fotografías saludando y sonriendo en alguna calle, para justificar su trabajo y que no hace campaña, manteniendo su bajo perfil.

Por el lado, los partidos políticos, sus dirigentes en campaña administran además de las prerrogativas, están en la conveniencia de ver qué candidatos tienen la posibilidad de competir con un buen resultado y los que por los efectos no prendieron, a esos les retiran apoyos y buscan negociar con los candidatos punteros de los otros partidos las listas de militantes para asegurar posiciones políticas o dinero para beneficio personal.

El día de la jornada electoral, tras los resultados, tres expresiones se conjugan en los protagonistas y sus equipos, quienes ganaron, las alegrías y el festejo no se hace esperar al saber que por el esfuerzo se consigue la victoria.

En contra parte los perdedores, externando fraude y rodó en las boletas, exigiendo a los órganos electorales claridad y culpando a a su equipo de los errores de la campaña, el candidato que sabiendo desde antes de iniciar que estaba perdido en la inercia de sus seguidores busca los medios de difusión para argumentar y sorprender a la ciudadanía.

La tercera es quien obtuvo un empate en la elección y que le corresponde a un tribunal electoral decidir el resultado ese sin duda es quien la angustia se la lleva a los siguientes días de la elección, tan desgastantes y lleno de optimismo hasta saber la resolución.

jvela@elsoldetampico.com.mx

fb: Jorge Vela Villarreal

@jorgevelavi