La tarde del 23 de septiembre de 1973 Pablo Neruda fue declarado muerto debido a cáncer de próstata con metástasis, con antecedentes de caquexia cancerosa. Sin embargo, estudios de años recientes han puesto en tela de duda este dictamen, señalando un posible envenenamiento.
Durante la dictadura de Augusto Pinochet en Chile, Neruda se convirtió en un crítico abierto del régimen y sufrió persecución política. Murió poco después del golpe militar de 1973, bajo circunstancias controvertidas.
La carrera política de Pablo Neruda
En el recuento de la vida del poeta la Fundación Neruda cuenta que el literato se unió al Partido Comunista de Chile en 1945, un paso que marcó el inicio de su compromiso político.
En su papel como diplomático, Neruda representó a Chile en varios países. Fue cónsul en España durante la Guerra Civil, donde apoyó a los republicanos. También sirvió como cónsul en México y en otros países.
En 1945, el poeta fue elegido senador de Chile por el Partido Comunista. Sin embargo, sus actividades políticas y su apoyo a la Unidad Popular, una coalición de izquierda, lo llevaron a enfrentar la persecución política y el exilio después del golpe militar de 1973.
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Pablo Neruda falleció el 23 de septiembre de 1973, días después del golpe de estado en Chile que derrocó al gobierno democráticamente elegido de Salvador Allende. Neruda, un firme partidario de Allende y un crítico del nuevo régimen militar encabezado por Augusto Pinochet, se encontraba en una situación delicada.
Primer veredicto: muerte natural
El escritor estaba en París cuando se sometió por primera vez a un tratamiento para el cáncer de próstata y finalmente regresó a Chile en 1972.
Un año después, los militares tomaron el poder. Las tropas saquearon y destruyeron la casa de Neruda en Santiago, la capital del país, y allanaron dos veces su casa en la costa, ubicada a unos 112 kilómetros al oeste, donde vivía con su esposa.
En medio del tumulto, el gobierno de México le ofreció asilo a Neruda. Pero días antes de su viaje programado, Neruda fue ingresado en la Clínica Santa María en Santiago, donde murió a los 69 años por cáncer de próstata.
En su momento, se formaron algunas sospechas por parte del público de una posible muerte planeada. A pesar de esto, la idea de que murió por causas naturales fue ampliamente aceptada en todo Chile.
Denuncia de 2011, comienzan las investigaciones
En 2011 se interpuso una nueva declaración, la cual fue cubierta por The New York Times. Manuel Araya, quien fue el chofer del poeta, dijo que Neruda le había confesado, en su lecho de muerte, que los médicos le inyectaron en el estómago una sustancia desconocida que provocó un profundo ardor.
A partir de esta declaración, empezaron los estudios de parte de familiares y amigos para esclarecer la verdad de la muerte del poeta.
En abril de 2013, el cuerpo de Neruda fue exhumado por orden del juez Mario Carrazo. Expertos forenses de Chile, España y Estados Unidos analizaron los restos y, siete meses después, publicaron un informe que decía que no se encontraron agentes químicos externos que pudieran relacionarse con su fallecimiento.
Sin embargo, los laboratorios forenses de la Universidad de Copenhague en Dinamarca y la Universidad McMaster en Canadá continuaron examinando los restos de Neruda, incluido su ADN.
2017: declaran resultados de botulismo
El medio El País, en su artículo, señala que en 2017 estas universidades informaron que la causa oficial de muerte por cáncer era incorrecta. En cambio, la probable causa de la muerte se dirigía a la bacteria Clostridium botulinum encontrada en un molar. Decidieron que realizarían exámenes genéticos para confirmar o excluir si le administraron la bacteria o, por el contrario, provenía de algún alimento contaminado.
Esta bacteria produce la toxina botulínica, el agente causal del botulismo, una enfermedad que ataca el sistema nervioso y puede causar dificultad para respirar, parálisis muscular y hasta la muerte.
En su informe final de febrero de 2023, los científicos concluyeron que la bacteria estaba en su cuerpo cuando murió, en parte al encontrar pequeñas cantidades de la bacteria en el suelo cerca de donde fue enterrado.
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Pero no pudieron determinar si lo mató, o incluso si la cepa de la bacteria era tóxica, porque solo pudieron reconstruir alrededor de un tercio de su genoma. Siendo el ADN tan antiguo, se había degradado.
¿Veredicto final?
El País también señaló que el caso Neruda ha pasado por dos jueces, comenzó en 2011 con Mario Carrazo y fue entregado a Paola Plaza en 2020. Es a ella a quien el último informe pericial fue entregado en el panel realizado en febrero de este año. Sin embargo, la actual juez tiene que pasar por 12 años de investigaciones y pruebas exhibidas antes de emitir el juicio final.
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La muerte de Pablo Neruda sigue siendo un tema de debate y especulación, y el misterio que rodea su fallecimiento ha contribuido a mantener viva su memoria y su legado.
