¿Por qué Gabriela Mistral, premio Nobel de literatura, visitó Tampico? En 1945, la labor artística de Mistral fue reconocida a nivel internacional por la Academia Sueca. En 1950, durante una temporada diplomática en nuestro país, la poeta residió unos días en el puerto, donde fue entrevistada por El Sol de Tampico. Esta es la historia.
La visita de Gabriela Mistral a México
El miércoles 06 de diciembre de 1950, El Sol de Tampico entrevistó a la escritora Gabriela Mistral, quién explicó que llevaba viviendo dos años en el estado de Veracruz como parte de su labor cultural como cónsul de la República de Chile.
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Mistral, quien definió su estancia en territorio mexicano como placentera, también expresó su sorpresa por los ataques hacia su reputación, en la ciudad de Xalapa, con motivo de las visitas puntuales de Diego Rivera y Lázaro Cárdenas a su domicilio.
De igual manera, Mistral comunicó su distanciamiento con José Vasconcelos, con quien había forjado una estrecha relación en 1922. Cuando el primer secretario de Educación Pública, la había invitado a formar parte de la campaña de alfabetización y fomento a la literatura, que estaba llevando a cabo en el país.
La relación con Vasconcelos vio su final, cuando el abogado mexicano, en palabras de Mistral, “se había retirado de los amigos de la Revolución, y tratando de mí, dijo que no me había definido. No sé si se refirió a la política, aunque sabe que nunca me he dedicado a ella”.
Mistral y su relación con la política
Resultan curiosas las declaraciones de la poeta sobre su poca intervención en cuestiones políticas, cuando parte de su entrevista a El Sol de Tampico, estuvo dedicada a sus opiniones en materia de derechos y diferencias ideológicas entre diversas culturas.
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A continuación, reproducimos un extracto de la nota publicada en 1950: “Desde que se tiene conocimiento de la existencia de las razas en el mundo, el simple color de estas han servido para discriminarse unos a otros hasta el grado de llegar a la guerra.
Así como en el siglo pasado, los norteamericanos y los latinoamericanos rompieron las cadenas de la esclavitud sin haber sufrido en ningún momento lo que han sufrido los asiáticos, puesto que el mundo dizque civilizado, los abandono a su suerte infeliz por milenios”.
Mistral y sus amigos tampiqueños
Una carta fechada en Tampico, Tamaulipas, al 18 de diciembre de 1950, conservada por la Biblioteca Digital del Patrimonio Iberoamericano, puede aclarar el motivo de la visita de la escritora a esta ciudad.
Al parecer, Mistral guardaba una relación con el matrimonio conformado por María G. de Corona y Marco Claudio Corona, ambos vecinos del Puerto, quienes escribieron las siguientes líneas:
“Queridas amigas: Esperamos que hayan tenido ustedes un feliz viaje, y que los contratiempos que encontraron en Tampico no hayan sido de grave consecuencia.
Como les habíamos prometido, les adjuntamos los recortes de la prensa local que tratan de su estancia aquí. Conservamos de ustedes el más grato recuerdo.”
Mistral estuvo en Tampico en compañía de Doris Danna, conocida benefactora de las artes y amiga íntima de la poeta. En la actualidad, diversos medios y biógrafos apuntan a la existencia de una relación romántica entre las partes.
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Los siguientes pasos de Mistral
La misiva del matrimonio Corona tenía como dirección del destinatario el Consulado Chileno en Nueva York, ubicado en la calle Broadway número 60.
Por los registros de El Sol de Tampico en 1950, sabemos que Mistral abandonó la ciudad el 05 de diciembre, a las 12 horas, por la carretera del Mante. Su siguiente destino era Estados Unidos de Norteamérica, después Nápoles en Italia y posteriormente Israel.
Mistral, cuyo nombre de nacimiento era Lucila Godoy, expuso ante este medio sus continuas travesías: “Tengo fama de inquieta por haber viajado por la mayor parte del mundo”.
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Entonces, ¿por qué Gabriela Mistral visitó Tampico? Lo más probable, como parte de una visita social a sus amigos de la ciudad y por curiosidad. Esta es la historia de cómo El Sol de Tampico, en 1950, entrevistó a la única mujer oriunda de Latinoamérica que ha ganado un Premio Nobel de Literatura.
