El tampiqueño Josué Rubén “Puchigol” Godínez Martínez, del famoso barrio del Cascajal, tiene una gran historia de amor y pasión por el futbol que ahora, en Nueva York infunde y hereda a su hijo.
Desde temprana edad practicó este deporte en las diferentes canchas que estaban alrededor de su colonia, el llamado Barrio Bravo, en compañía de familiares y amigos en donde demostró tener un gran nivel.
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En la actualidad radica en Nueva York, donde ve en su hijo Mateo Godínez Guanga, de apenas siete años gran potencial y sobre todo pasión por el balompié.
“Jugué desde niño en el barrio del Cascajal, de ahí soy. Estuve con equipos como Reforma Cascajal de 'Dany' Rodríguez, también jugué para las Águilas del Triángulo, en la liga del bordo en la Morelos desde los siete a los 19 años.
Mi posición era medio o centro delantero y ahora que veo a mi hijo me reflejo como cuando yo jugaba”, comentó para EL SOL DE TAMPICO.
Otros equipos donde militó en la zona sur está el Club México, donde logró campeonatos de goleo individual; así como colectivos Bad Boys en el Parque Méndez, donde disputó el famoso torneo de los barrios.
Posteriormente fue invitado a realizar pruebas con el Atlas de Guadalajara, sin embargo no tuvo los recursos suficientes y apunta, “el sueño se me apagó”, por lo que emprendió el viaje a Estados Unidos para ayudar a su familia.
Tenía 19 años cuando se mudó a Estados Unidos
Josué lo dejó todo para ir en busca del sueño americano, a los 19 años y rápidamente se instaló en Nueva York, una de las ciudades más grandes y cosmopolitas del mundo.
Tiene 15 años viviendo en la Gran Manzana, casado con la ecuatoriana Johanna Guanga, tienen tres hijos: Michelle, Ryan y Mateo.
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Es justamente Mateo quien cuenta con dotes extraordinarios para jugar al balompié, ya que comenzó su andar en el futbol a los tres años; a su corta edad ha portado la casaca de la Academia Elite River Head, juega como delantero, además de conquistar las redes y ser galardonado en diversas ocasiones.
Ha tenido la oportunidad de disputar diferentes certámenes como la Liga, Torneo Susan y New York Cup, en los cuales ha logrado captar la atención al demostrar su habilidad con el esférico, por la forma de definir ante el arquero y por esquivar a sus marcadores defensivos en la zona de ataque.
Es americanista y sueña con jugar en la Selección Mexicana
Mateo habla perfectamente español, posee triple nacionalidad, “a pesar de haber nacido acá, desea llegar a la Liga MX, acá tenemos dos equipos, el New York City y el Red Bull, él es 100% americanista, sueña algún jugar ahí, tiene como ídolos a Guillermo Ochoa y Roger Martínez, también le gustaría jugar con la Selección Mexicana”, destacó Josué Godínez, padre de Mateo.
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De esta manera el oriundo del Cascajal, no olvida sus orígenes y busca que su hijo Mateo continúe con la tradición de jugar y sentir la pasión por el futbol en Nueva York y muestre su talento en Estados Unidos, Ecuador o México.
