Hablar es muy sencillo. Sin embargo, saber escuchar con plena atención no lo es tanto. Una de las claves de una buena comunicación es conocer la importancia de no malinterpretar o sobre analizar la información transmitida. ¿Cómo se logra esto? A través de fomentar la escucha asertiva o activa. A continuación, cinco consejos claves para lograrlo.
El Diccionario del Español de México (DEM) define la palabra “escuchar” bajo la siguiente acepción: “prestar atención a algo que se dice, se aconseja o se pide”.
Prestar atención, en teoría, es un acto muy simple, implica lograr un estado de concentración, en el cual la energía se enfoca en observar, escuchar, analizar o realizar una labor determinada.
Problemas en la comunicación, ¿cómo mejorarlos?
Algo que en teoría es fácil de asimilar, en la práctica se vuelve más difícil. Los problemas en la comunicación humana se suscitan cuando una o ambas partes malinterpretan los mensajes transmitidos, ya sea porque el canal o el contexto no hayan sido los adecuados, o porque el contenido no fue expresado con claridad.
Acorde a los psicólogos Gordon Howard Bower y William O'Donohue los siguientes consejos pueden fomentar una escucha asertiva.
Primero, guardar silencio para escuchar el mensaje del emisor. La atención se concentra en las palabras pronunciadas por la otra persona. No permitir que la mente divague en juicios de valor o contraargumentos, en su lugar, tratar de generar empatía con el discurso.
Segundo, hacer preguntas que denoten interés en el tema. Cuando el emisor tome una pausa antes de proseguir, es buen momento para realizar interrogantes con el fin de profundizar aún más en la conversación.
Tercero, tener bajo dominio las emociones. No perder la calma ante la información brindada ni interponer las necesidades personales por encima de las necesidades de la contraparte.
Cuarto, mantener el contacto visual. De esta manera se transmite seguridad y confianza.
Quinto, cuidar la postura corporal. Espalda recta, hombros firmes y mentón arriba. Recurrir a una posición cómoda y no agresiva.
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¿Qué no es la comunicación asertiva?
Por su parte, la psicóloga Magdalena Sofía Pereira, expone cuáles son los comportamientos que no fomentan una escucha activa. Por el contrario, esta serie de acciones dificultan que las partes involucradas en la comunicación se puedan entender entre sí.
- No proponer soluciones o tratar de resolver el problema expuesto
- No enfocar la conversación en experiencias personales pasadas
- No restar importancia a lo que se está diciendo
- Evitar cambiar de tema
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Cuando sé fomenta la escucha activa es más sencillo entender a la otra persona. Cuando se presta atención al mensaje transmitido, es menos probable cundir a malinterpretar o sobre analizar la información recibida. Estos cinco consejos proporcionados por tres diferentes psicólogos pueden ser de gran utilidad para lograrlo.
