Para algunas personas pensar en la figura de un guardia forestal es extraño, incluso, entre risas recuerdan aquella caricatura de los 90 del oso Yogui que peleaba con un oficial dedicado a vigilar los bosques, sin embargo, en Tamaulipas la protección forestal está en alerta, ya que el 2023 es un año intensamente peligroso.
Este 31 de julio se conmemora de forma internacional el Día del Guardia Forestal o también denominado “guardaparques”.
“La Federación Internacional de Guardaparques, que representa a más de 45 países, adoptó el 31 de julio de 1992 como Día Internacional del Guardaparque, y cada tres años organiza un congreso mundial para evaluar la situación de estos conservacionistas”, informó el Gobierno de México.
Estos profesionales están a cargo del cuidado y manejo de las Áreas Naturales Protegidas (ANP), donde desarrollan planes de manejo, proyectos y estrategias con el apoyo y la cooperación nacional e internacional.
Está en riesgo la diversidad de Tamaulipas
El Programa Especial de Protección Civil de Temporada de Sequía, Estiaje e Incendios Forestales 2023 para Tamaulipas advirtió que este año 2023 es complicado no solo para la entidad, sino para todo el país debido a las intensas temperaturas y a la sequía.
“Debido a la escasa precipitación que ha incidido en la mayor parte del país y a las condiciones de heladas y temperaturas bajas, las autoridades en materia forestal pronostican para la próxima temporada de incendios forestales 2023, una temporada de mayor intensidad y extensión”, informó este documento que comprende de 80 páginas.
Este estudio se argumenta en la necesidad de prevenir los incendios forestales, ya que estos constituyen una de las principales causas de los procesos de fragmentación, deforestación y desertificación que afectan a México.
“Además de contaminar el aire y el agua, contribuyen al efecto invernadero, reducen las fuentes de agua, degradan los suelos, aumentan la escorrentía y el potencial de erosión”, informó.
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“Traen consigo efectos negativos directos en la vida humana por muerte, lesiones o enfermedad y la pérdida de bienes”, se dio a conocer.
De acuerdo con el reporte, 24 municipios de los 43 que integran el territorio tamaulipeco, 24 son considerados como vulnerables a incendios.
“Se pueden citar como los más vulnerables a: Jaumave, Ocampo, Tula y Victoria. Por el contrario, se pueden considerar de prioridad por el tipo de vegetación a los municipios de Gómez Farías, Miquihuana, Jaumave y Victoria”, indicó el estudio.
El 17 de marzo del año 2022 una fogata generó un incendio en la reserva ecológica “El Cielo” , un mes después se logró apagar el fuego que siniestró unas 6 mil 800 hectáreas.
Los brigadistas denunciaron que trabajaban con equipo del 2021.
Conafor requiere recursos
EL SOL DE TAMPICO informó el pasado 18 de enero que debido a que no cuentan con ropa adecuada y equipo contra incendios, brigadistas de la Comisión Nacional Forestal (Conafor) Tamaulipas lanzaron un ultimátum.
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Esta acción se sumó al reclamo de los trabajadores de Conafor de la Ciudad de México; Tabasco, Colima, Quintana Roo, Tlaxcala y Jalisco, quienes exigen ropa adecuada y material para sofocar los incendios.
Casi un mes después, el 12 de febrero, el Grupo Parlamentario del Partido Acción Nacional presentó una iniciativa en la que se solicitó al Gobierno Federal dotar de mayor equipo y medios a la delegación de Conafor en Tamaulipas, luego del despido de 22 brigadistas.
“Para brindar el equipo de protección necesario, mejorar las condiciones y el estado de los vehículos, así como brindar las mejores condiciones de protección a la integridad de las y los trabajadores de la Comisión Nacional Forestal en Tamaulipas”, exponen.
Guardias forestales sin nombramiento
Los habitantes de la biosfera de “El Cielo” que conocen esta reserva como la palma de su mano, son los guardias forestales sin nombramiento quienes diariamente cuidan este espacio que además de ser su sustento es su casa.
“Así como tal nombrado por alguien o alguna autoridad no hay guardias forestales pero sí, en su mayoría los pobladores de la biosfera lo somos todos”, sostuvo el ejidatario y prestador de servicios turísticos de El Cielo, Héctor Martínez Nava,
Explicó que en los ejidos se cuenta con una organización para proteger la zona.
“Cada ejido cuenta con mesas directivas, comisariados y consejo de vigilancia; esta última se encarga de también hacer recorridos por sus tierras y así reportar algún incidente que afecte el bosque".
Señaló que el conocimiento adquirido por la familia lo ha llevado a ser un guía para los brigadistas foráneos en casos de emergencias.
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“Un día mi padre-tío me enseñó caminos, veredas, brechas, lugares con agua, puntos de referencia, rutas de salida, así como tipos de suelos y geografía”, destacó.
Informó que los ejidatarios realizan un esfuerzo por enseñar a sus niños a proteger el bosque.
“Los niños que han tenido el privilegio de haber nacido y crecido en esta bonita área natural son niños que tienen una infancia en contacto con la naturaleza; no comprenden el tamaño de un incendio, ni la causa, pero lo ven como una tragedia“, finalizó.
Municipios vulnerables a incendios
- Abasolo
- Aldama
- Antigua
- Morelos
- Bustamante
- Casas
- El Mante
- Gómez
- Farías
- González
- Güémez
- Hidalgo
- Jaumave
- Jiménez
- Llera
- Mainero
- Miquihuana
- Nuevo
- Morelos
- Ocampo
- Palmillas
- San Carlos
- San Nicolás
- Soto
- La marina
- Tula
- Victoria
- Villagrán
