/ jueves 9 de mayo de 2024

Fractal / Madres que gritan en silencio

Hoy nos meteremos en la piel de las madres que no pueden gritar por ayuda.

Hola soy la mamá tlacuache, durante muchos años la responsabilidad de mantener mi estirpe ha recaído en mi marsupio, cada año luchamos en contra de las dificultades naturales, como el hambre y la sed, pero desde que el humano comenzó a desvivirnos solo por nuestra apariencia, la vida es cada vez más dura, yo sólo pido respeto para mí y mis hijos.

Saltemos a un grupo de madres que sufren día con día el desprecio y maltrato, sólo por existir y hacer lo que la naturaleza les indica, reproducirse.

Hola somos las madres del grupo llamado plaga, soy una rata, soy un pichón, soy una salamanquesa, soy una serpiente. Nosotras somos las representantes de muchas más especies que el humano considera malignas, pero solo queremos seguir existiendo como lo hacíamos desde antes que ustedes llegarán a nuestros hogares.

En ese entonces no se excedía nuestro número, ya que existía un control biológico el cual mantenía las especies en su justa medida, pero al diezmar las madres del grupo de depredadores, como lo eran, la familia gavilán, zorro, coyote, ocelote etc.

Ustedes mismos causaron un desequilibrio y hoy en día nos eliminan de la forma más cruel posible, sin tener ninguna culpa, sólo por existir.

Otro grupo que también da su opinión es el de las madres Ardilla y el grupo unido reptiles y aves pequeñas.

Nosotros exigimos justicia ante el gran aumento de gatos domésticos, que por irresponsabilidad de los humanos, dejan en la orfandad a miles de bebés, los cuales mueren de hambre en su propio nido, por la falta de nosotras que somos asesinadas sólo por juego del simpático Michi.

Y así todas las madres en el entorno silvestre tiene que sufrir un calvario para que sus pequeños retoños puedan sobrevivir en este urbanizado planeta.

Si eres una feliz madre y puedes leer esto, te exhorto a empatizar con todas las demás progenitoras que no pueden gritar por ayuda.

Los humanos desde nuestro Antropocentrismo no tomamos en cuenta que las demás especies también “tienen madre” y les gustaría ser felices como tú. ¿Usted qué opina?

Regeneración 19.

Hoy nos meteremos en la piel de las madres que no pueden gritar por ayuda.

Hola soy la mamá tlacuache, durante muchos años la responsabilidad de mantener mi estirpe ha recaído en mi marsupio, cada año luchamos en contra de las dificultades naturales, como el hambre y la sed, pero desde que el humano comenzó a desvivirnos solo por nuestra apariencia, la vida es cada vez más dura, yo sólo pido respeto para mí y mis hijos.

Saltemos a un grupo de madres que sufren día con día el desprecio y maltrato, sólo por existir y hacer lo que la naturaleza les indica, reproducirse.

Hola somos las madres del grupo llamado plaga, soy una rata, soy un pichón, soy una salamanquesa, soy una serpiente. Nosotras somos las representantes de muchas más especies que el humano considera malignas, pero solo queremos seguir existiendo como lo hacíamos desde antes que ustedes llegarán a nuestros hogares.

En ese entonces no se excedía nuestro número, ya que existía un control biológico el cual mantenía las especies en su justa medida, pero al diezmar las madres del grupo de depredadores, como lo eran, la familia gavilán, zorro, coyote, ocelote etc.

Ustedes mismos causaron un desequilibrio y hoy en día nos eliminan de la forma más cruel posible, sin tener ninguna culpa, sólo por existir.

Otro grupo que también da su opinión es el de las madres Ardilla y el grupo unido reptiles y aves pequeñas.

Nosotros exigimos justicia ante el gran aumento de gatos domésticos, que por irresponsabilidad de los humanos, dejan en la orfandad a miles de bebés, los cuales mueren de hambre en su propio nido, por la falta de nosotras que somos asesinadas sólo por juego del simpático Michi.

Y así todas las madres en el entorno silvestre tiene que sufrir un calvario para que sus pequeños retoños puedan sobrevivir en este urbanizado planeta.

Si eres una feliz madre y puedes leer esto, te exhorto a empatizar con todas las demás progenitoras que no pueden gritar por ayuda.

Los humanos desde nuestro Antropocentrismo no tomamos en cuenta que las demás especies también “tienen madre” y les gustaría ser felices como tú. ¿Usted qué opina?

Regeneración 19.