/ domingo 21 de enero de 2024

Hablando de medicina y salud | Deficiencia de la hormona del crecimiento del adulto

Tradicionalmente cuando hablamos de hormona de crecimiento pensamos inmediatamente en la edad pediátrica, sin embargo, en los últimos años se ha ido incrementando el interés sobre el uso de hormona de crecimiento en la población adulta, lo cual causa un intenso debate en la comunidad médica. Su uso en adultos es un área relativamente nueva y en evolución.

La principal indicación de uso de hormona de crecimiento en adultos es la deficiencia de hormona de crecimiento del adulto, la cual tiene un espectro amplio de sintomatología que afectan negativamente la calidad de vida, incluyendo la disminución de la masa muscular, incremento de la grasa visceral, disminución de la densidad mineral ósea y problemas como depresión y ansiedad. El tratamiento en los casos documentados de deficiencia de hormona de crecimiento del adulto es con hormona de crecimiento, la cual contribuye a incrementar la calidad de vida del paciente adulto que la padece.

Pareciera que la hormona de crecimiento solo tendría efectos sobre la edad pediátrica, pero esta hormona tiene efecto sobre el metabolismo de las proteínas, las grasas y el control metabólico de los carbohidratos, se ha observado participa en la regulación del metabolismo óseo, la composición corporal, en la regulación de las grasas corporales y en los factores que participan en el riesgo cardiovascular; no solo en la población pediátrica, sino también en el adulto. De hecho, el paciente que fue sometido a uso de hormona de crecimiento durante la niñez, debe de ser reevaluado al llegar a la edad adulta y completar su etapa de crecimiento de estatura para decidir si continua con reemplazo de hormona de crecimiento durante y al llegar a esta etapa de la vida.

Sin embargo, aún su uso es controvertido. Existe una preocupación creciente sobre su uso indiscriminado que puede acarrear algunos efectos secundarios como diabetes, retención de líquidos, enfermedades cardiovasculares. Los efectos de la terapia a largo plazo aún están bajo investigación y se requieren más estudios para recomendar su uso en estos casos. Recientemente algunos grupos han mostrado interés de utilización de la hormona de crecimiento como una terapia antienvejecimiento. Algunos proponen que puede revertir o disminuir los efectos del envejecimiento. En lo personal considero que el uso de la hormona de crecimiento con este fin requiere un análisis sistemático de las investigaciones al respecto y por el momento solo se justifica su uso en individuos que son deficientes de la misma; por lo tanto, debemos advertir que el uso indiscriminado de la hormona de crecimiento implica riesgos para la salud. La hormona de crecimiento recombinante humana ofrece sin duda beneficios a los niños y adultos que padecen deficiencia de esta por diversas causas, su uso debe ser cuidadosamente evaluado y supervisado por un profesional experto. La investigación como dije no respalda su uso como una terapia antienvejecimiento y se limita solo aquellos que viven como deficiencia de esta. La decisión de usar hormona de crecimiento debe basarse en una evaluación detallada de cada caso individual, ponderando los riesgos y beneficios potenciales contra los posibles riesgos y efectos secundarios.

Tradicionalmente cuando hablamos de hormona de crecimiento pensamos inmediatamente en la edad pediátrica, sin embargo, en los últimos años se ha ido incrementando el interés sobre el uso de hormona de crecimiento en la población adulta, lo cual causa un intenso debate en la comunidad médica. Su uso en adultos es un área relativamente nueva y en evolución.

La principal indicación de uso de hormona de crecimiento en adultos es la deficiencia de hormona de crecimiento del adulto, la cual tiene un espectro amplio de sintomatología que afectan negativamente la calidad de vida, incluyendo la disminución de la masa muscular, incremento de la grasa visceral, disminución de la densidad mineral ósea y problemas como depresión y ansiedad. El tratamiento en los casos documentados de deficiencia de hormona de crecimiento del adulto es con hormona de crecimiento, la cual contribuye a incrementar la calidad de vida del paciente adulto que la padece.

Pareciera que la hormona de crecimiento solo tendría efectos sobre la edad pediátrica, pero esta hormona tiene efecto sobre el metabolismo de las proteínas, las grasas y el control metabólico de los carbohidratos, se ha observado participa en la regulación del metabolismo óseo, la composición corporal, en la regulación de las grasas corporales y en los factores que participan en el riesgo cardiovascular; no solo en la población pediátrica, sino también en el adulto. De hecho, el paciente que fue sometido a uso de hormona de crecimiento durante la niñez, debe de ser reevaluado al llegar a la edad adulta y completar su etapa de crecimiento de estatura para decidir si continua con reemplazo de hormona de crecimiento durante y al llegar a esta etapa de la vida.

Sin embargo, aún su uso es controvertido. Existe una preocupación creciente sobre su uso indiscriminado que puede acarrear algunos efectos secundarios como diabetes, retención de líquidos, enfermedades cardiovasculares. Los efectos de la terapia a largo plazo aún están bajo investigación y se requieren más estudios para recomendar su uso en estos casos. Recientemente algunos grupos han mostrado interés de utilización de la hormona de crecimiento como una terapia antienvejecimiento. Algunos proponen que puede revertir o disminuir los efectos del envejecimiento. En lo personal considero que el uso de la hormona de crecimiento con este fin requiere un análisis sistemático de las investigaciones al respecto y por el momento solo se justifica su uso en individuos que son deficientes de la misma; por lo tanto, debemos advertir que el uso indiscriminado de la hormona de crecimiento implica riesgos para la salud. La hormona de crecimiento recombinante humana ofrece sin duda beneficios a los niños y adultos que padecen deficiencia de esta por diversas causas, su uso debe ser cuidadosamente evaluado y supervisado por un profesional experto. La investigación como dije no respalda su uso como una terapia antienvejecimiento y se limita solo aquellos que viven como deficiencia de esta. La decisión de usar hormona de crecimiento debe basarse en una evaluación detallada de cada caso individual, ponderando los riesgos y beneficios potenciales contra los posibles riesgos y efectos secundarios.