Entre 1936 a 1970, circulaba el papel moneda de menor denominación en la historia del Banco de México, se trataba del billete de un peso. El cual tenía en el anverso la imagen del Calendario Azteca y en el reverso la Columna de la Independencia. ¿Qué podrías comprar con esa cantidad de dinero en los años 50 en la zona conurbada de Tampico? Nosotros te lo decimos.
El billete de un peso, emitido por la primera familia AA del Banco Central, pero fabricado por la Compañía Estadounidense de Billetes (“American Bank Note Company, AB Corp”), estaba elaborado en papel algodón, con medidas de 157 por 67 milímetros, en color verde y rojo.
El valor adquisitivo de un billete de un peso a inicios de los años 50
Durante febrero de 1951 se podía comprar desde una Coca Cola pequeña de vidrio por 25 centavos; hasta una “cremaquilla” en barra por 70 centavos. Además de una cajetilla de “Rialtos” por 35 centavos, cuya publicidad afirmaba: “Fume el cigarro que más de 200 médicos prefieren”.
Quienes desearan asistir, el domingo 25 de febrero de 1951, al partido de fútbol entre los equipos “Atlante” y “Tampico”, en el Estadio de la ciudad, lo podían hacer con un precio de entrada para el público infantil de 25 centavos en sol y de un peso con 50 centavos en tribuna.
El mismo día del evento deportivo, en el cine Tampico se presentaba la película “Rosauro Castro”, protagonizada por Pedro Almendáriz, con un costo de acceso de 75 centavos en galería. En tanto, en el establecimiento “Reforma” se podía ver “Tarzán” con Lex Barker y Vanessa Brown, en ese entonces se podía ingresar al anfiteatro tras pagar un peso con 50 centavos.
El domingo 01 de febrero de 1953, a las 16:30 horas, se invitaba a la población a la “Gran Pachanga Cómico-Taurina en la Plaza de Toros”. A las 21:00 horas daría inicio el baile de la misma organización, pero en el Cine Politeama, el boleto para el público femenino se promocionaba a 50 centavos.
El jabón “Florient” se anunciaba como “el jabón de las novias” e invitaba a los lectores a “usarlo en el baño diario y a toda hora para una eterna luna de miel”. Dependiendo del tamaño del producto se adquiría en tiendas por 45 a 95 centavos.
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La Agencia General de Economía de Tamaulipas anunciaba que a partir del miércoles 18 de febrero de 1953, entrarían en vigor una serie de reducciones en el valor de la leche y de otros insumos. La medida se había decidido durante el último Comité de Control de Precios y Distribución de la zona.
Por entre 85 centavos a un peso se comercializaba el litro de leche pasteurizada y bronca, tanto en el expendio como a domicilio. También por un peso se adquiría un kilo de lisa. Además, por un peso con 10 centavos y por un peso con 20 centavos, respectivamente, se conseguía una docena de hueso rojo y hueso blanco.
Quienes desearán invertir en su imagen personal, por un peso con 80 centavos podían comprar talco para baño y por un peso con 60 centavos una toalla para el rostro.
El poder liberatorio de un billete de un peso a finales de los años 50
En febrero de 1955, podrías obtener una Coca Cola por 30 centavos y una Pepsi Cola por 40 centavos. La cajetilla de Montecarlo se negociaba a 70 centavos la pieza.
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La audiencia interesada en ver a Marilyn Monroe podía acudir al Cine Altamira, donde se proyectaría “Almas perdidas” o “Río sin retorno”, cinta de 1954, dirigida por Otto Preminger.
En febrero de 1959, los exprimidores de limón se comerciaban a 55 centavos en la ferretería “La Paloma” y dos jabones de barra se cotizaban a un peso con 40 centavos.
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Hasta aquí ha llegado nuestro recorrido por los precios de la zona conurbada del sur de Tamaulipas. Gracias a los ejemplares consultados en la Hemeroteca de EL SOL DE TAMPICO, pudimos conocer cuál era el valor adquisitivo de un billete de un peso durante la década de los años 50, donde con esa cantidad se podía asistir al cine o a un baile, además de comprar cajetillas, “cremaquilla” y jabones.