¿Te encuentras fatigado, sin energía y sin ánimos? Corre y busca un árbol. No, no es broma. También puedes ir a la playa. Lo importante es que salgas a “tomar aire”. La salud mental se ve altamente beneficiada cuando las personas entran en contacto con la naturaleza.
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La revista National Geographic publicó un artículo de Florence Williams titulado “Este es tu cerebro al aire libre”, en su volumen 38, en enero del 2016. El texto habla sobre las múltiples ventajas de disfrutar del medio ambiente. Williams acompañó al psicólogo David Strayer, de la Universidad de UTAH, a una acampada al río San Juan con sus estudiantes.
Durante la experiencia, Straker conectó a todos los asistentes de la expedición a un aparato EEG portátil, con el objetivo de medir sus ondas cerebrales. Si la hipótesis de Straker es cierta y el contacto con la naturaleza reduce la actividad de la corteza prefrontal, entonces, las ondas theta del cerebro tienen que disminuir. ¿Cuáles crees que fueron los resultados?
Lo único que tienes que hacer es observar
Da un paso hacia el mundo exterior y contempla el horizonte, ve el cielo y los árboles, repite esta actividad todos los días. No tienes que salir de la ciudad, basta con acudir a un espacio abierto, a un parque público, por ejemplo, o al patio de tu casa. Esas actividades tan sencillas pueden disminuir tu sufrimiento mental.
La Universidad de Chiba, en Japón, llevó a cabo un estudio liderado por el antropólogo Yoshifumi Miyazaki, donde 84 personas debían caminar durante 15 minutos al día en un bosque. Ese gesto les valió una reducción del 16% en sus niveles de estrés.
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El Instituto de Recursos Naturales de Finlandia establece un mínimo de cinco horas mensuales al aire libre, para disminuir los índices de melancolía y de depresión.
Corea del Sur, después de conocer los problemas de estrés y adicción de sus ciudadanos, comenzó a abrir “Bosques de sanación”, espacios naturales donde las personas pueden ir a relajarse. El gobierno incluso cubre los gastos de transportación y excursión de sectores vulnerables de la población, como bomberos o niños maltratados.
Los resultados del experimento de Strayer
Transcurridos unos cuantos meses de la acampada en el río de San Juan, Williams recibió los resultados de su electroencefalografía (EEG). Straker le envió también la interpretación de los datos: la actividad eléctrica de su corteza prefrontal había disminuido durante su estancia en el bosque.
La investigación de David Strayer apoya la teoría de la “Restauración de la atención”, propuesta por los psicólogos Stephen y Rachel Kaplan, ambos catedráticos de la Universidad de Michigan, en Estados Unidos.
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La hipótesis de la “Restauración de la atención” sostiene que la fatiga mental, consecuencia directa de las sobre exigencias físicas e intelectuales de la vida cotidiana, disminuye incluso un 16% en contacto con la naturaleza. Por otra parte, pasar tiempo al aire libre, de acuerdo a los mismos psicólogos, puede incrementar hasta un 50% la capacidad creativa de las personas.
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En fin, aunque la ciencia todavía no lo asegura de manera fehaciente, múltiples estudios señalan que un método eficiente, gratuito y benéfico para la salud física y mental de las personas es salir a “tomar aire”. Si te sientes cansado, desmotivado y decaído, ve a caminar a un parque o hunde tus pies en la arena, te vas a sentir mejor.
