Juvencio Gómez Medina es uno de los pocos sobrevivientes del reducido grupo de pobladores que hace décadas vio el resurgimiento de la Congregación Anáhuac como una localidad del municipio de Pueblo Viejo, Veracruz.
Congregación Anáhuac se localiza en las márgenes del río Pánuco y geográficamente es el punto más cercano al centro de Tampico, Tamaulipas. Sus terrenos colindan con la laguna de Pueblo Viejo, famosa en sus buenos años por la cantidad y calidad del ostión que de ahí se extraía.
El señor Gómez Medina cuenta que es descendiente directo de las cinco familias que hace más de 90 años llegaron a este lugar con la esperanza de contar con un terreno en el que pudieran construir su vivienda para tener un patrimonio para sus hijos.
Casi todas las personas que llegaron a fundar lo que hoy es Congregación Anáhuac comenzaron a dedicarse a distintas actividades para obtener el sustento para sus familias: Unos pescadores en la laguna, otros comerciantes y unos más desempeñaban diversos oficios tanto en el pequeño pueblo como en Tampico, que es en donde se concentraba la principal oferta de trabajo.
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Entonces, debido a que el territorio del municipio se encontraba habitado solamente en algunas zonas como la Congregación Miguel Hidalgo y la de Mata Redonda, esos lugares concentraban a más familias que decidieron quedarse tras el cierre de la refinería que operó en los primeros años del siglo pasado.
Debido a que había disponibilidad de terrenos y muchas personas llegaban de otros lugares del país en búsqueda de mejores oportunidades de vida, hubo cinco familias que decidieron llegar a Congregación Anáhuac porque el precio de la tierra era más barato que en Tampico. Además, tendrían casi a tiro de piedra la ciudad con su movimiento comercial y sus enormes oportunidades de empleo.
El comienzo, simple y lejano
En aquellos lejanos años, el comienzo para las cinco familias que llegaron primero a este lugar fue simple, pero al mismo tiempo, duro.
Gómez Medina dice que sus parientes no batallaron para comprar: Iban, veían el terreno y le decían a los ejidatarios qué extensión querían. Como no se usaban para esto cintas de medición, se hacía el cálculo en función de cosas tan simples como árboles, rocas, cuerpos de agua o ciertas características del predio.
Así fue como se hicieron de amplias extensiones que fueron ocupando y que con el paso del tiempo decidieron ir también vendiendo, conforme la necesidad económica o la demanda de terrenos fue creciendo.
El predio en el mismo vive y donde tiene su casa, fue junto con otros terrenos una herencia de sus tíos.
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Lo difícil para ello fue el comienzo, pues aunque tenían grandes extensiones de tierra, debían obtener ingresos para sus familias y así fue como tenían que trabajar en diversas actividades lo mismo en las demás congregaciones cercanas que en Tampico, para lo cual tenían que cruzar el río Pánuco.
La Congregación hoy en día
Actualmente, Congregación Anáhuac tiene poco más de 14 mil habitantes, prácticamente toda su extensión está urbanizada y la gente que ahí habita tiene todos los servicios. La actividad económica es dinámica y se percibe más movimiento que la misma cabecera municipal, a donde la gente va a realizar trámites.
La cercanía con Tampico, a unos cientos de metros a través de botes de motor que cruzan el río Pánuco, hace que su principal relación comercial, educativa, de salud y hasta de placer sea con el puerto tamaulipeco.
Gómez Medina sabe que son otros tiempos, que las cosas cambiaron y que de aquella época en la que solía salir a pescar a la laguna o al río, pues lo mismo la contaminación de ambos cuerpos de agua como el crecimiento demográfico hace más difícil esta tarea.
Con el paso de los años, el último sobreviviente directo de las familias que llegaron hace décadas a habitar lo que hoy es Congregación Anáhuac ve con alegría cómo creció este amplio sector, al grado de ser uno de los más dinámicos del municipio.
Ha visto cómo de aquellos terrenos enormes sin servicios, con grandes cantidades de mosquitos y con la facilidad de tener casi a la mano cualquier producto de la laguna o del río, se ha convertido en una de las zonas habitacionales más fuertes, con mayor proyección y economía que la misma cabecera municipal.
Congregación Anáhuac fue conocida como congregación Matías
El cronista del norte de Veracruz Martín Pérez Sanmartín mencionó que en el surgimiento de lo que hoy en día se le conoce como Congregación Anáhuac en aquellos años era distinto por decreto del Ejecutivo del 18 de abril de 1928 la Gaceta Oficial 48 del 21 de abril en el gobierno provisional de Abel Rodríguez fue considerado como Congregación Matías del municipio de Pueblo Viejo.
A un año del cambio de gobernación por decreto 112 del 2 de julio de 1929 de la Gaceta Oficial 82 del 9 de julio por el gobierno de Adalberto Tejeda de Pliego el cambio de la congregación la cual se denominará, como se le conoce actualmente Congregación Anáhuac del municipio de Pueblo Viejo formada por el poblado conocido con el nombre de Tampico Pánuco del municipio de Pueblo Viejo en el decreto del Ejecutivo del 16 de enero de 1936 la Gaceta Oficial 9 del 21 de enero el gobierno de Guillermo Rebolledo se expropiaron 424 mil 080 hectáreas de terreno para dotar la fundación legal de la Congregación de Anáhuac del municipio de Pueblo Viejo, Veracruz.
Durante todos estos años la Congregación Anáhuac va de la mano con el crecimiento y desarrollo de la cabecera municipal, cabe señalar que antes de tener su desarrollo era una población de grandeza histórica dado que por sus espaciosos terreno en la parte poniente se encontraba un helipuerto, así como las comunicaciones del tren vía “Magozal” que todavía queda rastro de esa vida pasada.
El modo de transporte principalmente era cruzar de lado la cabecera municipal por el canal de “San Francisco” localizado en la parte baja del puente “Anáhuac” era el modo de cruzar esa franja de la laguna frente al río Pánuco, ya que durante esos años se utilizaban embarcaciones de madera y remo, principalmente para poder abastecer de alimentos a la comunidad mismas que se apoyaban de estas embarcaciones conocidas como “bestias” mismas que estaban ubicadas a un costado de la cooperativa “21 de marzo” al existir un atracadero en donde el Gremio Unido de Alijadores servía de distribuidor para la población.
Al crearse los puentes “Prieto” y ”Anáhuac” la población tuvo que ser reubicada para ampliar las carreteras que comunicaran hasta el centro del Pueblo Viejo por lo que las familias que habitaban este sector fueron reubicadas a un lugar conocido como el “Relleno” o colonia “Nueva” en lo que actualmente es conocido como Benito Juárez, estas familias fueron indemnizadas, además se les construyó su patrimonio que era su casa y contó con los servicios que anteriormente no contaba en la Congregación Anáhuac, lo pobladores obtuvieron la red eléctrica, la vía de comunicación y sobre todo, la comunicación directa con el puerto con un paso muy importante para trasladar a sus habitantes al municipio vecino Tampico a través del paso denominado “El Humo”.
Actualmente, las líneas de transporte han mejorado generando mayores accesos para poder llegar hasta sus viviendas como “Casa Blanca” y los “Cocos” y en el tiempo antiguo existió una rampa de coches que acercaban a los lugareños hacia los pasos para transbordar e ir a su rutina de trabajo a Tampico, las actividades económicas que desarrollaban era sobre la laguna de Pueblo Viejo obteniéndose de ella el “ostión”, el “camarón” y la especie de pescado.
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En la actualidad su desarrollo se le ha visto en crecimiento al contar sobre las márgenes del río Pánuco del lado veracruzano numerosas empresas de infraestructuras pesadas que han dado prioridad a su desarrollo y que se forme diferentes tipos de empleos por lo regular flotantes, a esta Congregación “Anáhuac” tiene comunicación con diferentes ejidos del municipio de Pueblo Viejo y tiene su cartera frontal con Pánuco, Tamaulipas y Ciudad Valles cuenta también con diferentes espacios deportivos para practicar su deporte favorito como el beisbol y futbol.
Como un antecedente histórico la “Congregación Anáhuac” se ha visto afectada por los diferentes ciclones, el del año de 1933 y el ciclón denominado el “Hilda” en 1955 con su inundación que desapareció toda la congregación dejando únicamente a flote lo que conocemos como sector la “Loma”; con el paso de los años el sector se recuperó hasta ser lo que hoy en día se le conoce.
