/ martes 2 de febrero de 2021

Cambiavía | El diccionario del diablo

En 1913 organizó todos sus asuntos personales, luego partió a México, el cual se encontraba en plena guerra de la Revolución. Ahí desapareció. Algunos dicen que viajó a México a buscar a Pancho Villa, otros argumentan que fue una especie de suicidio, sabiendo que su vida en esas circunstancias corría peligro de muerte.

Hay quienes creían que en realidad nunca salió del país, sino que se suicidó en secreto al saltar de un acantilado en el Gran Cañón. Cualquiera que sea la historia real, una cosa es segura: nadie volvió a saber de él o a verlo. “En cuanto a mí, mañana salgo de aquí hacia un destino desconocido”, eso expresó en la última carta que escribió.

Uno de los grandes misterios literarios de la vida real es el caso de la desaparición del escritor Ambrose Bierce, a principios del siglo XX, considerado como uno de los grandes narradores estadounidenses, junto con Mark Twain, Edgar Allan Poe y Nathaniel Hawthorne. Ambrose nació el 24 de junio de 1842, en el condado de Meigs, Ohio, hijo de Marcus Aurelius y Laura Sherwood Bierce. Cuatro años después la familia se mudó a Walnut Creek, Indiana. Era una familia “curiosa” integrada por 13 hijos, cuyos nombres comenzaban con la letra “A”.

Ambrose tuvo una infancia solitaria, según él mismo se describía. Tras haber cursado el primer año de la preparatoria y con 19 años de edad, abandonó su hogar y encontró un trabajo como aprendiz de impresor en un periódico que luchaba contra la esclavitud. Después, la necesidad le obligó a aceptar todo tipo de trabajos, así que lo mismo se ocupó en una fábrica de ladrillos que en una tienda minorista. También intentó regresar a los estudios escolares, pero no lo consiguió y, finalmente, se alistó con los Voluntarios de Infantería de Indiana, durante la Guerra Civil. En ese tiempo se desempeñó como cartógrafo y soldado, su labor fue reconocida y recibió varios ascensos. Cuando participaba en la batalla de Kennesaw Mountain fue herido y, por esa causa, liberado del servicio militar.

Entonces viajó a San Francisco, ahí trabajó brevemente en el departamento del Tesoro y luego en la Casa de Moneda, antes de iniciar su carrera en el periodismo. En 1868 ya publicaba una columna en el San Francisco News Letter, en sus primeros textos comenzó a destacar por su mordaz análisis político y su sátira, la cual se ejemplifica muy bien en su famoso Diccionario del Diablo (un diccionario que presenta definiciones nuevas y sarcásticas de términos comunes).

Hacia 1871, Bierce publicó su primer cuento de terror: “The Haunted Valley”, y contrajo matrimonio con Mary Ellen “Mollie” Day, mujer perteneciente a la alta sociedad, hija de un rico minero del Área de la Bahía. Al año siguiente decidieron mudarse a Inglaterra, en donde pasaron por muy buenos momentos tanto en la carrera de Bierce como en la vida en pareja. Molley tuvo dos hijos: Day, Leigh; Bierce escribió para dos revistas y publicó sus tres primeros libros. Hacia 1875, la pareja regresa a los Estados Unidos, donde nació su hija llamada Hellen.

En 1887, Bierce comenzó a escribir una nueva versión de su columna, ahora titulada “The Prattler”, para The San Francisco Examiner, trabajo que llevó a cabo hasta 1909. Durante ese tiempo se ganó la animadversión de mucha gente del medio; Bierce, un escritor franco, influyente y cínico recibió muchos apodos, incluido el de “El amargo Bierce”. Lo cierto es que era un hombre talentoso y logró un gran éxito dentro del periodismo, él describía su trabajo de una manera sencilla, pero valiente: “Estoy a favor de preservar la antigua y primitiva distinción entre el bien y el mal”.

Entre 1881 y 1903 publicó su primera colección de cuentos titulada “Cuentos de soldados y civiles”, un conjunto de relatos basados en sus experiencias durante su participación en la Guerra Civil. En 1906 publica Cynic’s Work Book, mejor conocido como El Diccionario del Diablo, un diccionario bastante singular, pues se trata de una compilación de definiciones satíricas. Aquí una pequeña muestra: “Año, s. Período de trescientos sesenta y cinco desengaños”, “Aburrido, adj. Dícese del que habla cuando uno quiere que escuche”, “Autoestima, s. Evaluación errónea”, “Cerebro: un aparato con el que pensamos”, “Costumbre, s. Cadena de los libres”, “Futuro, s. Época en que nuestros asuntos prospera, nuestros amigos son leales y nuestra felicidad está asegurada”, “Infortunio, s. Especie de fortuna que siempre llega”, “Nihilista, s. Ruso que niega la existencia de todo, menos de Tolstoi. El jefe de esta escuela es Tolstoi”.

Este fabuloso escritor tuvo que enfrentar serios problemas personales, los cuales empeoraron, primero con la muerte de sus dos hijos, luego con la separación de su esposa, la que murió poco tiempo después mientras se llevaba a cabo el juicio de divorcio.

Bierce escribió historias espeluznantes enmarcadas principalmente en la frontera estadounidense, entre 1881 y 1901. Su obra es un legado que supieron aprovechar muy bien escritores como H. P. Lovecraft y Stephen King. Su cuento más famoso “Una ocurrencia en Owl Creek Bridge”, en el que un soldado de la Guerra Civil alucina que ha viajado a través del tiempo ha sido adaptado en varios medios, incluido un episodio de la serie The Twilight Zone.

Nunca se sabrá a ciencia cierta cuál fue su paradero, pero siempre tendremos la oportunidad de reencontrarnos con él, a través de la lectura de su obra literaria.

En 1913 organizó todos sus asuntos personales, luego partió a México, el cual se encontraba en plena guerra de la Revolución. Ahí desapareció. Algunos dicen que viajó a México a buscar a Pancho Villa, otros argumentan que fue una especie de suicidio, sabiendo que su vida en esas circunstancias corría peligro de muerte.

Hay quienes creían que en realidad nunca salió del país, sino que se suicidó en secreto al saltar de un acantilado en el Gran Cañón. Cualquiera que sea la historia real, una cosa es segura: nadie volvió a saber de él o a verlo. “En cuanto a mí, mañana salgo de aquí hacia un destino desconocido”, eso expresó en la última carta que escribió.

Uno de los grandes misterios literarios de la vida real es el caso de la desaparición del escritor Ambrose Bierce, a principios del siglo XX, considerado como uno de los grandes narradores estadounidenses, junto con Mark Twain, Edgar Allan Poe y Nathaniel Hawthorne. Ambrose nació el 24 de junio de 1842, en el condado de Meigs, Ohio, hijo de Marcus Aurelius y Laura Sherwood Bierce. Cuatro años después la familia se mudó a Walnut Creek, Indiana. Era una familia “curiosa” integrada por 13 hijos, cuyos nombres comenzaban con la letra “A”.

Ambrose tuvo una infancia solitaria, según él mismo se describía. Tras haber cursado el primer año de la preparatoria y con 19 años de edad, abandonó su hogar y encontró un trabajo como aprendiz de impresor en un periódico que luchaba contra la esclavitud. Después, la necesidad le obligó a aceptar todo tipo de trabajos, así que lo mismo se ocupó en una fábrica de ladrillos que en una tienda minorista. También intentó regresar a los estudios escolares, pero no lo consiguió y, finalmente, se alistó con los Voluntarios de Infantería de Indiana, durante la Guerra Civil. En ese tiempo se desempeñó como cartógrafo y soldado, su labor fue reconocida y recibió varios ascensos. Cuando participaba en la batalla de Kennesaw Mountain fue herido y, por esa causa, liberado del servicio militar.

Entonces viajó a San Francisco, ahí trabajó brevemente en el departamento del Tesoro y luego en la Casa de Moneda, antes de iniciar su carrera en el periodismo. En 1868 ya publicaba una columna en el San Francisco News Letter, en sus primeros textos comenzó a destacar por su mordaz análisis político y su sátira, la cual se ejemplifica muy bien en su famoso Diccionario del Diablo (un diccionario que presenta definiciones nuevas y sarcásticas de términos comunes).

Hacia 1871, Bierce publicó su primer cuento de terror: “The Haunted Valley”, y contrajo matrimonio con Mary Ellen “Mollie” Day, mujer perteneciente a la alta sociedad, hija de un rico minero del Área de la Bahía. Al año siguiente decidieron mudarse a Inglaterra, en donde pasaron por muy buenos momentos tanto en la carrera de Bierce como en la vida en pareja. Molley tuvo dos hijos: Day, Leigh; Bierce escribió para dos revistas y publicó sus tres primeros libros. Hacia 1875, la pareja regresa a los Estados Unidos, donde nació su hija llamada Hellen.

En 1887, Bierce comenzó a escribir una nueva versión de su columna, ahora titulada “The Prattler”, para The San Francisco Examiner, trabajo que llevó a cabo hasta 1909. Durante ese tiempo se ganó la animadversión de mucha gente del medio; Bierce, un escritor franco, influyente y cínico recibió muchos apodos, incluido el de “El amargo Bierce”. Lo cierto es que era un hombre talentoso y logró un gran éxito dentro del periodismo, él describía su trabajo de una manera sencilla, pero valiente: “Estoy a favor de preservar la antigua y primitiva distinción entre el bien y el mal”.

Entre 1881 y 1903 publicó su primera colección de cuentos titulada “Cuentos de soldados y civiles”, un conjunto de relatos basados en sus experiencias durante su participación en la Guerra Civil. En 1906 publica Cynic’s Work Book, mejor conocido como El Diccionario del Diablo, un diccionario bastante singular, pues se trata de una compilación de definiciones satíricas. Aquí una pequeña muestra: “Año, s. Período de trescientos sesenta y cinco desengaños”, “Aburrido, adj. Dícese del que habla cuando uno quiere que escuche”, “Autoestima, s. Evaluación errónea”, “Cerebro: un aparato con el que pensamos”, “Costumbre, s. Cadena de los libres”, “Futuro, s. Época en que nuestros asuntos prospera, nuestros amigos son leales y nuestra felicidad está asegurada”, “Infortunio, s. Especie de fortuna que siempre llega”, “Nihilista, s. Ruso que niega la existencia de todo, menos de Tolstoi. El jefe de esta escuela es Tolstoi”.

Este fabuloso escritor tuvo que enfrentar serios problemas personales, los cuales empeoraron, primero con la muerte de sus dos hijos, luego con la separación de su esposa, la que murió poco tiempo después mientras se llevaba a cabo el juicio de divorcio.

Bierce escribió historias espeluznantes enmarcadas principalmente en la frontera estadounidense, entre 1881 y 1901. Su obra es un legado que supieron aprovechar muy bien escritores como H. P. Lovecraft y Stephen King. Su cuento más famoso “Una ocurrencia en Owl Creek Bridge”, en el que un soldado de la Guerra Civil alucina que ha viajado a través del tiempo ha sido adaptado en varios medios, incluido un episodio de la serie The Twilight Zone.

Nunca se sabrá a ciencia cierta cuál fue su paradero, pero siempre tendremos la oportunidad de reencontrarnos con él, a través de la lectura de su obra literaria.