/ domingo 28 de abril de 2024

Liberándose del alcohol / Compartir su proceso de recuperación

El objetivo principal de la organización de Alcohólicos Anónimos es: mantenernos sobrios y ayudar a otros alcohólicos a alcanzar el estado de sobriedad.

Existe un programa de doce pasos para lograr este objetivo. Este programa es un proceso que paulatinamente transforma la vida de un esclavo del alcohol en una persona libre y con un propósito claramente definido: ser útil y feliz.

El primer paso de los doce, es aceptar que se es un enfermo alcohólico. Quizá sea el más difícil, porque es ir en contra de uno mismo. Generalmente uno se inicia en el consumo del alcohol por curiosidad, por necesidad de pertenecer a un grupo, por herencia etc. Después lo hace por gusto y se sigue por necesidad. Cuando alguien se hace adicto al alcohol y lo tiene que dejar porque se está autodestruyendo es algo muy complicado. Cuando se acepta que se es un enfermo alcohólico, es decir, se da el primer paso en el camino de la recuperación, se está abriendo la mente a un proceso de cambio que se actualiza solo por 24 horas, es decir, solo por hoy. Para continuar con el segundo paso, el alcohólico debe asistir a sus reuniones de terapia a un grupo de alcohólicos anónimos, para vivir su catarsis. Este es un proceso de limpieza interior y de aprendizaje. Al escuchar a sus compañeros de grupo, cómo llegaron a la agrupación, qué están haciendo para recuperar su sobriedad, qué les da resultado y qué no para su mejoramiento, el alcohólico recién llegado adopta lo que juzga que le ayudará e ignora lo que no le ayudará.

En las reuniones de grupo el alcohólico aprenderá a vivir los doce pasos, contará con la ayuda de un asesor o padrino que lo orientará durante todo el proceso. En las buenas y en las malas el alcohólico ya no estará solo.

La lectura diaria de la doctrina del A.A. es el alimento intelectual que lubrica el desarrollo del proceso del exborracho. El servir a sus compañeros y/o a la organización es también parte ineludible en la recuperación. Sin embargo, lo que no falla para lograr el objetivo es compartir con otros alcohólicos este proceso de recuperación. El libro que contiene la filosofía de A.A. lo dice de la siguiente manera:

”La experiencia práctica demuestra que no hay nada que asegura tanto la inmunidad a la bebida como el trabajo intensivo con otros alcohólicos. Funciona cuando fallan otras actividades. Esta es nuestra duodécima sugerencia: ¡llevar este mensaje a los alcohólicos! Tú puedes ayudar cuando nadie más puede. Tu puedes ganarte la confianza de ellos cuando otros fracasan. Recuerda que están muy enfermos”

“La vida tendrá un nuevo significado. Ver a las personas recuperarse, verlas ayudar a otras, ver cómo desaparece la soledad, ver a una comunidad desarrollarse a tu alrededor, tener una multitud de amigos; esta es una experiencia que no debe perderse. Sabemos que no querrás perdértela. El contacto frecuente con recién llegados y entre unos y otros es el punto luminoso de nuestra vida” (Libro Alcohólicos Anónimos pag. 83.)

Compartir la ideología que garantiza que solo por hoy no consumirá alcohol, le produce paz, serenidad y una alegría indescriptible al alcohólico que ejecuta esta actividad.

Pocos alcohólicos se atreven a vivir esta poderosa realidad, pero quienes lo hacen han revolucionado su vida hacia la enorme satisfacción de cosechar la utilidad y felicidad que constituye la finalidad existencial de A.A.

Si quieres ayudar a un borracho a dejar de serlo marca el 8332125634, 8332289003 ó el 8331055995 ahí te orientarán cómo.

El objetivo principal de la organización de Alcohólicos Anónimos es: mantenernos sobrios y ayudar a otros alcohólicos a alcanzar el estado de sobriedad.

Existe un programa de doce pasos para lograr este objetivo. Este programa es un proceso que paulatinamente transforma la vida de un esclavo del alcohol en una persona libre y con un propósito claramente definido: ser útil y feliz.

El primer paso de los doce, es aceptar que se es un enfermo alcohólico. Quizá sea el más difícil, porque es ir en contra de uno mismo. Generalmente uno se inicia en el consumo del alcohol por curiosidad, por necesidad de pertenecer a un grupo, por herencia etc. Después lo hace por gusto y se sigue por necesidad. Cuando alguien se hace adicto al alcohol y lo tiene que dejar porque se está autodestruyendo es algo muy complicado. Cuando se acepta que se es un enfermo alcohólico, es decir, se da el primer paso en el camino de la recuperación, se está abriendo la mente a un proceso de cambio que se actualiza solo por 24 horas, es decir, solo por hoy. Para continuar con el segundo paso, el alcohólico debe asistir a sus reuniones de terapia a un grupo de alcohólicos anónimos, para vivir su catarsis. Este es un proceso de limpieza interior y de aprendizaje. Al escuchar a sus compañeros de grupo, cómo llegaron a la agrupación, qué están haciendo para recuperar su sobriedad, qué les da resultado y qué no para su mejoramiento, el alcohólico recién llegado adopta lo que juzga que le ayudará e ignora lo que no le ayudará.

En las reuniones de grupo el alcohólico aprenderá a vivir los doce pasos, contará con la ayuda de un asesor o padrino que lo orientará durante todo el proceso. En las buenas y en las malas el alcohólico ya no estará solo.

La lectura diaria de la doctrina del A.A. es el alimento intelectual que lubrica el desarrollo del proceso del exborracho. El servir a sus compañeros y/o a la organización es también parte ineludible en la recuperación. Sin embargo, lo que no falla para lograr el objetivo es compartir con otros alcohólicos este proceso de recuperación. El libro que contiene la filosofía de A.A. lo dice de la siguiente manera:

”La experiencia práctica demuestra que no hay nada que asegura tanto la inmunidad a la bebida como el trabajo intensivo con otros alcohólicos. Funciona cuando fallan otras actividades. Esta es nuestra duodécima sugerencia: ¡llevar este mensaje a los alcohólicos! Tú puedes ayudar cuando nadie más puede. Tu puedes ganarte la confianza de ellos cuando otros fracasan. Recuerda que están muy enfermos”

“La vida tendrá un nuevo significado. Ver a las personas recuperarse, verlas ayudar a otras, ver cómo desaparece la soledad, ver a una comunidad desarrollarse a tu alrededor, tener una multitud de amigos; esta es una experiencia que no debe perderse. Sabemos que no querrás perdértela. El contacto frecuente con recién llegados y entre unos y otros es el punto luminoso de nuestra vida” (Libro Alcohólicos Anónimos pag. 83.)

Compartir la ideología que garantiza que solo por hoy no consumirá alcohol, le produce paz, serenidad y una alegría indescriptible al alcohólico que ejecuta esta actividad.

Pocos alcohólicos se atreven a vivir esta poderosa realidad, pero quienes lo hacen han revolucionado su vida hacia la enorme satisfacción de cosechar la utilidad y felicidad que constituye la finalidad existencial de A.A.

Si quieres ayudar a un borracho a dejar de serlo marca el 8332125634, 8332289003 ó el 8331055995 ahí te orientarán cómo.