Desde tiempos remotos, los humanos han estado sometidos a un alto grado de estrés. Sin importar quiénes sean, las personas tienden al agobio con respecto a su existencia por distintos tipos de factores, desde financieros hasta laborales.
Existen múltiples técnicas para disminuir los niveles de estrés, aquí presentamos cinco ideas para mejorar la calidad de vida.
¿Qué es el estrés?
La Real Academia de la Lengua Española (RAE) define el estrés como “Tensión provocada por situaciones agobiantes que originan reacciones psicosomáticas o trastornos psicológicos a veces graves”.
Bajo dicha definición, todas las personas son propensas a sufrir cierto grado de estrés en todos los momentos de su vida. Ya sea por motivos financieros, laborales, políticos, familiares y emocionales.
Acorde a la Organización Mundial de la Salud, el estrés puede ser resultado de situaciones de extrema gravedad como violencia familiar o sexual, enfermedades y desplazamiento del hogar por situaciones políticas o económicas.
De igual manera, el estrés se puede originar por condiciones, igual de importantes, pero de menor intensidad, como discusiones familiares, crisis existenciales, mal ambiente de trabajo o problemas escolares.
¿Cuáles son las consecuencias negativas del estrés?
De acuerdo a National Geographic, un alto grado de estrés puede afectar los músculos y los sistemas respiratorio, cardiovascular y gastrointestinal; entre los síntomas más evidentes están:
- Dolores de cabeza
- Dolor en la zona lumbral
- Dificultad para respirar
- Hiperventilación
- Aumento de la presión arterial
- Náuseas
- Distensión abdominal
- Aumento o disminución del apetito
La Organización Mundial de la Salud (OMS) señala las consecuencias a nivel psicológico del estrés:
- Problemas de concentración
- Cambios repentinos de humor
- Ataques de agresividad
- Dificultad para conciliar el sueño
- Sentimientos de culpa y tristeza
- Presencia de llanto y una sensación continua de cansancio
¿Cuáles son las técnicas para disminuir los niveles de estrés?
National Geographic en su nota “cinco hábitos que pueden ayudarte a reducir el estrés” propone las siguientes técnicas para mejor la calidad de vida:
- Mantener una rutina equilibrada
- Practicar actividad física constante
- Optar por una alimentación balanceada
- Disminuir el uso de dispositivos electrónicos
- Mejorar la calidad y duración del sueño
Mantener una rutina equilibrada se refiere a destinar tiempo para distintos tipos de actividades: hacer espacio para la jornada laboral, la convivencia familiar, salir con amigos, desarrollar hábitos de crecimiento personal, atender la casa, etc.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda a los adultos entre los 18 a los 64 años, practicar entre 150 a 300 minutos de actividad física de intensidad moderada a intensa.
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Una alimentación balanceada implica otorgar al organismo, en justa medida, todos los macro y micronutrientes necesarios para su funcionamiento, entre ellos, carbohidratos, proteínas, grasas, vitaminas y minerales. La OMS aconseja una ingesta diaria de 400 gramos de frutas y verduras.
La psicóloga Gabriela Luxo, en entrevista para National Geographic, recomienda poner un límite al tiempo destinado a los dispositivos móviles. Entre otras consecuencias a la salud, el uso excesivo de tecnología provoca fatiga visual.
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Mejorar la calidad y duración del sueño es crucial para reponer energía y favorecer el cuidado de la mente y el cuerpo, protegiendo los sistemas inmunológico, cardiovascular y metabólico. El Instituto de Salud para el Bienestar recomienda un ciclo de sueño entre siete y ocho horas para los adultos.
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Estas cinco técnicas para disminuir los niveles de estrés pueden parecer demasiado obvias y triviales. Sin embargo, son herramientas oportunas, funcionales y accesibles para lograr despejar la mente, liberar tensión corporal y lograr un mayor estado de relajación. Todo lo cual repercute en mejorar la calidad de vida.