Extrañas exhibiciones las de los equipos italianos, la más importante de ellas, fue la que dejó a su selección fuera del Mundial de Rusia 2018, por Suecia, que de ninguna manera puede ser comparada en calidad con Italia, que ocupa el segundo lugar empatada con Alemania en Copas del Mundo ganadas, con cuatro, solo abajo de Brasil que ha ganado cinco y, este próximo Mundial era la gran oportunidad de alcanzarlos.
Es claro que algo no se está haciendo bien en el futbol italiano, pues sus equipos de club así nos lo hacen saber con sus increíbles actuaciones que finalmente no les son suficientes para avanzar por ejemplo en la Champions League. Primero, el sorprendente Roma, que en el papel aparecía como un sencillo escollo que el poderoso Barcelona superaría sin dificultad alguna y, el juego de ida sirvió para reforzar esta suposición. ¿Y que ocurrió? De alguna forma, la mentalidad de los romanos cambió para bien y, en una reacción histórica, Roma fue superior a los favoritos cuando en su Camp Nou lograron una remontada para recordarla siempre.
Con un día de diferencia el Juventus italiano con más escudetos ganados, perdía ante el Barcelona en Turin tres goles a cero, diferencia que no hacía honor a la gerarquía de ambos equipos, Juventus reconocido como el máximo triunfador de la Liga de su país y, que en esta cocasión, cuando los momios proponían el encuentro como muy parejo, los merengues humillaron vergonzozamente a los turineses en su misma casa, e igual que como ocurriera con la Roma y Barcelona, supusimos que el juego de vuelta entre el Juventus y el Real Madrid era de mero trámite y, ustedes ya se saben lo demás.
No es posible que los dos máximos representantes del futbol italiano, exhiban ante su público, uno de los más conocedores y exigentes del mundo, la imágen más pobre futbolísticamente hablando, permitiendo que su público vea como los odiados vecinos españoles los humillen en su propios estadios Meazza de Turin y Olímpico de Roma, para que siete días después se cobren la humillación haciéndolo como visitantes. Algo debe de estar mal ahí, pues considero imposible que en siete días, todo lo malo que sirvió para lastimar al público italiano, haya sido enmendado para ofrecer luego una reacción tan brillante, aplicando a los españoles el conocido “Ojo por ojo, diente por diente”
Hoy, la Roma, supuestamente más motivada gracias a la hazaña de que todos fuimos testigos, se ha presentado ante los sorprendentes rojos del Liverpool, que sueñan con volver a la gloria pasada cuando eran ellos los representantes importantes de Inglaterra en las justas internacionales, aquellos que al referirse al Manchester United, miraban hacia abajo de la tabla general, de la que ellos fueron cabeza por muchos años, pensando que los diablos jamás podrían alcanzarlos, hasta que entre Mat Busvy y Alex Ferguson revertieron las cosas.
Ese Liverpool que tanto tiempo ha soportado el dominio en el futbol inglés de su más odiado rival, ha brindado hoy una gran exhibición en la que llegó a tener abajo a la Roma cinco goles a cero, para que cuando todos los que mirabamos el encuentro, veíamos más próximo el sexto gol de los rabanitos, apareció repentinamente la otra cara de la Roma, la cara de la loba rabiosa que defiende con todo a sus hijos Romulo y Remo, acortando la diferencia en dos ocasiones, reacción que hace suponer que en Roma se repetirán los drásticos cambios que hace una semana nos sorprendieran a quienes en en esa ocasión nos regalaran un sinúmero de emociones.
Cuando ve uno las actuiaciones de estos equipos italianos, no podemos más que relacionar tan drásticos cambios, con sucesos semejantes a niveles administrativos. No es conveniente para la buena organización de los Campeonatos Mundiales, que equipos como el italiano, ahora si, que como solemos calificar en México, considerado entre los tres más grandes del mundo, compartiendo con Alemania la segunda posición, cada cual con cuatro Mundialas ganados y teniendo a Brasil en primer lugar con cinco Copas en su haber, se haya quedado sin la oportunidad de darles alcance, dejando esa opción para los peligrosos alemanes que, agradecen la ausencia de su único competidor para llegar a la cumbre.
¿Como ven ustedes? ¿Podrá la Roma repetir la hazaña de remontar los tres goles de ventaja que le endilgó el Liverpool? Y ahí estaremos frente al televisor esperando el resultado tan importante para los ingleses y los italianos, sobre todo para los latinos, que teniendo la sangre caliente, solemos desde la comodidad de nuestro asiento, ya sea en un estadio o frente al televisor, sufrir como un verdadero drama la derrota, o elevarse hasta el nivel de los dioses celebrando la victoria... Nadie es indispensable, pero a muchos lamentaremos la ausencia de Italia en Rusia 18.
Hasta pronto amigo.
