/ martes 15 de mayo de 2018

En aquel 2008, el mundo del futbol se vistió de rojo

El 2008 fue un año que se distinguió por haberse vestido de rojo. El 2008, en materia futbolera, nos dejó muchas cosas buenas, pero igual nos dejó temas para analizar y corregir.

Como de costumbre el nivel de la Liga no fue del todo de nuestro agrado y menos lo fue la debacle del Tricolor, fracaso preolímpico incluido. En cuanto a lo demás, una marea roja invadió al mundo del futbol, principalmente en la segunda mitad de 2008, comenzando con la coronación del Manchester United en la Liga Premier y en la Champions League, a la par de la consagración del astro portugués Cristiano Ronaldo como el mejor jugador del mundo. El mismo cuadro inglés despidió el año ganando el Mundial de Clubes en tierras niponas. Mientras que el futbol azteca, en ese mismo certamen, tuvo que conformarse con el cuarto lugar alcanzado por los Tuzos de Pachuca.

Y la que hasta ahí portó el mote de Furia Española, rompió con 44 años de sequía al ganar la Eurocopa y, gracias al estilo ofensivo que ofreció, se llevó los halagos de todo el mundo, además del reconocimiento para Luis Aragonés que calló todas las voces que exigían la presencia de Raúl González, reconocido como el mejor jugador español de la historia, ejemplo que me parece apropiado para Argentina, que creo haría bien con cortarse el ombligo que los ata a Lionel Messi y, finalmente, el técnico Javier Aguirre volvió a los primeros planos al Atlético de Madrid.

En América, el Internacional de Porto Alegre ganó la Copa Sudamericana y, finalmente, Toluca dejó en claro que es el mejor equipo mexicano en torneos cortos y, a partir de ese momento el tercer grande del balompié mexicano gracias a la obtención del Apertura 2008. Y, aunque no de rojo, pero sí alusivo al momento, en ese 2008 el Chicago Fire, equipo rojo, desembolsaría la cantidad de dos millones seiscientos mil dólares al año para cubrir el sueldo de Cuauhtémoc Blanco, quien se robó el año en México jugando para el Santos de Torreón, que disputó la final del Apertura 2008 a los Diablos del Toluca, edición que hoy vuelve a repetirse.

Y como lo permite la programación del futbol de Estados Unidos, el Cuauh, adorado en todas las plazas del futbol mexicano, en aquel 2008 dobleteó jugando para los rojos del Chicago Fire y en México con el Santos de Torreón. Así, en su segundo año en Estados Unidos, Cuauhtémoc Blanco siguió demostrando que la calidad no está reñida con la edad. Y alguien tendría que oponerse al rojo y, esos fueron los guerreros verdiblancos del Santos de Torreón, en donde el Temo causó revuelo al vestir la camiseta lagunera hasta la semifinal del Clausura 2008. Al estar ausentes de la competencia los dos grandes, América y Guadalajara, el Cuauh dio color a aquellas finales en las que el Santos obtuvo bajo la dirección de Daniel Guzmán su tercera corona al empatar con el Cruz Azul, a los que finalmente vencieron con un global de 3-2.

El 2008 fue un año que se distinguió por haberse vestido de rojo. El 2008, en materia futbolera, nos dejó muchas cosas buenas, pero igual nos dejó temas para analizar y corregir.

Como de costumbre el nivel de la Liga no fue del todo de nuestro agrado y menos lo fue la debacle del Tricolor, fracaso preolímpico incluido. En cuanto a lo demás, una marea roja invadió al mundo del futbol, principalmente en la segunda mitad de 2008, comenzando con la coronación del Manchester United en la Liga Premier y en la Champions League, a la par de la consagración del astro portugués Cristiano Ronaldo como el mejor jugador del mundo. El mismo cuadro inglés despidió el año ganando el Mundial de Clubes en tierras niponas. Mientras que el futbol azteca, en ese mismo certamen, tuvo que conformarse con el cuarto lugar alcanzado por los Tuzos de Pachuca.

Y la que hasta ahí portó el mote de Furia Española, rompió con 44 años de sequía al ganar la Eurocopa y, gracias al estilo ofensivo que ofreció, se llevó los halagos de todo el mundo, además del reconocimiento para Luis Aragonés que calló todas las voces que exigían la presencia de Raúl González, reconocido como el mejor jugador español de la historia, ejemplo que me parece apropiado para Argentina, que creo haría bien con cortarse el ombligo que los ata a Lionel Messi y, finalmente, el técnico Javier Aguirre volvió a los primeros planos al Atlético de Madrid.

En América, el Internacional de Porto Alegre ganó la Copa Sudamericana y, finalmente, Toluca dejó en claro que es el mejor equipo mexicano en torneos cortos y, a partir de ese momento el tercer grande del balompié mexicano gracias a la obtención del Apertura 2008. Y, aunque no de rojo, pero sí alusivo al momento, en ese 2008 el Chicago Fire, equipo rojo, desembolsaría la cantidad de dos millones seiscientos mil dólares al año para cubrir el sueldo de Cuauhtémoc Blanco, quien se robó el año en México jugando para el Santos de Torreón, que disputó la final del Apertura 2008 a los Diablos del Toluca, edición que hoy vuelve a repetirse.

Y como lo permite la programación del futbol de Estados Unidos, el Cuauh, adorado en todas las plazas del futbol mexicano, en aquel 2008 dobleteó jugando para los rojos del Chicago Fire y en México con el Santos de Torreón. Así, en su segundo año en Estados Unidos, Cuauhtémoc Blanco siguió demostrando que la calidad no está reñida con la edad. Y alguien tendría que oponerse al rojo y, esos fueron los guerreros verdiblancos del Santos de Torreón, en donde el Temo causó revuelo al vestir la camiseta lagunera hasta la semifinal del Clausura 2008. Al estar ausentes de la competencia los dos grandes, América y Guadalajara, el Cuauh dio color a aquellas finales en las que el Santos obtuvo bajo la dirección de Daniel Guzmán su tercera corona al empatar con el Cruz Azul, a los que finalmente vencieron con un global de 3-2.