Esta es mi primer colaboración del 2020, así como la décimo tercera de Emprende y Aprende, en virtud de ello y, para iniciar al cien este año, te traigo un tema de vital importancia si pretendes salir a la conquista del mundo de los negocios…
El entorno financiero es un ambiente dinámico y por ello, experimenta constantes cambios, un tema propio de la finanzas es el que tiene que ver con el costo del dinero, el recurso que todos requerimos para emprender, sin embargo nos podría costar demasiado aprender a manejarlo.
El dinero como recurso, es un bien en sí, por lo tanto tiene un costo y una pérdida de valor a través del tiempo, ello se explica fácil al revisar el clásico ejemplo de tener doscientos pesos que han sido guardados en un colchón o caja a manera de “ahorro”, esos mismos doscientos pesos los ocupas para comprar algo un tiempo después y te das cuenta de que el poder adquisitivo de ese mismo valor no es capaz de mantenerse, es decir, ya no puedes comprar lo mismo con esos doscientos pesos y no es magia, su explicación tiene que ver con el estudio del origen y destino del dinero.
Por ello, al utilizar este recurso en alguna adquisición se debe valorar su costo, por ejemplo, al momento de hacer uso de préstamos o líneas de crédito.
En este sentido toma especial relevancia la tasa de interés, la cual te explicaré a través de este tema desde su teoría hasta su aplicación en sencillos ejemplos.
¿Qué es la tasa de interés?
La tasa de interés es la cantidad de dinero, que por lo regular representa un porcentaje generado del crédito o préstamo que se ha requerido y que el deudor deberá pagar a quien le presta. En términos simples; es el precio del uso del dinero. En el caso de los emprendedores; es importante conocer el valor actual de estos indicadores debido, a que afectan de manera directa, ya sea positiva o negativamente a tu negocio.
El porcentaje de la tasa de interés se determina basándose en diversos factores, en el caso de las instituciones bancarias se depende directamente del banco central, el Banco de México en nuestro país, es el encargado de definir el interés para frenar las alzas y mantener una estabilidad entre la oferta y la demanda según el consumo.
Sin embargo, una pregunta que todos podríamos hacernos es ¿Por qué se cobra?
Una sencilla explicación es que la tasa de interés representa un balance entre el riesgo asumido, como la inflación, que es el aumento generalizado de los bienes y servicios de un país, o la falta de pago de todo o parte del préstamo, por ello, cualquier institución te solicitará que le sea devuelta una cantidad de dinero adicional considerando lo anterior.
Ahora bien, existen dos tipos de interés, el simple, que es una sola cantidad por todo el préstamo; o el compuesto, que se calcula según el tiempo por el que se te ha otorgado el crédito, ya sea anual, mensual, semanal o diario. Para poder calcularlo es necesario conocer cuatro elementos importantes:
a) El capital, es decir, la cantidad del dinero prestado
b) El tipo de tasa de interés elegido
c) El tiempo por el que se realiza el préstamo, y…
d) De qué tipo es de acuerdo a la clasificación.
Una vez que tengas estos datos será mucho más fácil llevar a cabo un uso adecuado de tus finanzas.
La siguiente semana te explicaré la clasificación de las tasas de interés y el mejor criterio de elección de acuerdo a su uso.
Coméntame tu opinión y mantengamos comunicación a través de mis redes sociales y dirección de correo electrónico que te dejo a continuación..
iHasta la próxima semana!
e-mail: francisco.javier.pedraza@outlook.com
Twitter e Instagram: @frankjpedraza
