Un enfermo alcohólico necesita urgentemente alimentar su mente con ideas renovadoras que lo impulsen a salir del bache emocional en el que vive.
La comunidad de Alcohólicos Anónimos sostiene que el alcoholismo es una enfermedad trifásica, es decir que daña la mente, el cuerpo y el espíritu. También afirma que es incurable, que solo se puede detener. Tal como sucede con muchas otras enfermedades que son incurables y que los pacientes aprendemos a convivir con ellas. Por ejemplo la diabetes, causante de muchísimas muertes. Sin embargo si un paciente obedece a su doctor, toma sus medicamentos tal y como se los prescriben, hace ejercicio físico y mantiene adecuadamente su dieta, puede convivir con su enfermedad y ser productivamente feliz.
Alcohólicos Anónimos sugiere la práctica existencial de un programa de recuperación, que consta de 12 pasos, el cual hace posible que a base de ir poniendo en práctica ciertos principios básicos, el borrachito o borrachita saque fuerzas de flaqueza y se decida por tapar la botella y deje de consumir alcohol por el resto de su vida.
El enfermo alcohólico inicia un proceso de recuperación, en donde su primer fruto es dejar de consumir bebidas alcohólicas. Esto lo obtiene con solo asistir a las reuniones de terapia grupal, en donde escucha a otras personas que ya tienen tiempo sin beber y que empezaron como él lo está haciendo en ese momento. El compartir las experiencias que tuvo que vivir un alcohólico como consecuencia directa de su alcoholismo, muchas veces es aterrador e impactante para el recién llegado como aquel que llorando a grito abierto compartió que estaba huérfano por su culpa. Una noche totalmente borracho llevaba a su madre de regreso a casa en su coche y se estrelló con un poste en donde murió su madre, él pasó al hospital y luego a la cárcel. O la señora que golpeó a su hijita de dos años porque le tiró su bebida mientras jugaba en la sala de su departamento. La golpeó tanto que la dejó inconsciente y tuvieron que llevarla al hospital. Al día siguiente la señora no sabía dónde estaba su hija. Estas experiencias provocan en el que las escucha un fuerte deseo de evitar la causa inmediata de tantas atrocidades. EL ALCOHOL. Con el tiempo el consumidor comprende que en realidad el alcohol no es la causa primaria de su excesivo consumo, sino que hay problemas emocionales que lo impulsan a fugarse de esa realidad insufrible y se fuga en el alcohol, quien se encarga de embrutecerlo y conducirlo por caminos infrahumanos.
En esa situación la filosofía de los Doce Pasos entra en acción y con una energía superlativa hace reaccionar al alcohólico y lo impulsa poderosamente a luchar por la recuperación de sus cualidades innatas y adormecidas. Diariamente se inyectan nuevas y poderosas ideas en la mente del alcohólico que lo van capacitando poco a poco hasta que llegue a controlar sus disparatadas emociones.
Los Doce Pasos contienen una poderosa ideología que transforma la mente de los seres humanos que se deciden a ponerlos en práctica. La tolerancia, la comprensión, la honestidad y el amor son algunos principios que concurren a la transformación de un alcohólico anónimo y todo con absoluta libertad, sin jefes, sin imposiciones pero sí con el ejemplo.
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