/ domingo 20 de junio de 2021

Ocurrencias del futbol | Alemania firme, polacos y españoles, pendientes

Los polacos se las verán con Suecia y los ibéricos con Eslovaquia.

La preparación táctica es la fase en la que el entrenador introduce sistemas, esquemas o módulos en su equipo, para lograr el perfecto acoplamiento entre todas las líneas de juego -defensa, centro del campo y ataque-, procurando lograr el máximo rendimiento en la competición. Cuando se prepara tácticamente a un equipo de futbol y de cualquier deporte colectivo siempre se ha de procurar que los sistemas se ajusten a las capacidades de los jugadores y nunca intentar adaptar a los jugadores al sistema. Con ello se logrará siempre el mejor rendimiento según la capacidad natural de cada uno.

La preparación táctica se rige por tres principios fundamentales: potencia del juego de ataque, velocidad de ejecución y de movimiento y, control del adversario y desmarque propio. El fin principal de un equipo de futbol es el gol; para conseguirlo hay que atacar y para atacar hay que poseer una determinada velocidad de ejecuciones y movimiento y el saber trasladarse de la fase defensiva -control del adversario- a la ofensiva -desmarque propio-. Las llamadas transiciones defensa ataque y ataque defensa constituyen la parte más importante de los sistemas tácticos y en ella cada entrenador debe trabajar con los elementos que tiene a su disposición.

Se exigirán para desarrollar una potencia de ataque realmente competitiva, una perfecta sincronización en los intercambios de puestos -velocidad de ejecución- y un notable sentido de la anticipación -velocidad de movimiento-. Ambos se consiguen en la práctica diaria del entrenamiento, aunque las dos partes se diferencian porque la velocidad de ejecución es un movimiento mecánico (por consiguiente asimilable a través de la práctica por todo jugador), mientras que el sentido de la anticipación depende no solo de la capacidad de ocupar la posición correcta, sino también de la inteligencia del jugador y de su capacidad atlética.

Generalmente cuando se habla de la táctica se piensa en la magia del entrenador que será capaz con su intuición, de desbaratar los planes de su rival. En realidad la preparación táctica requiere un estudio exhaustivo de las características del propio equipo y del equipo rival, que no siempre será el mismo.

Y todo esto que les cuento, es lo que nos mostró hoy el equipo alemán, que con una frialdad increíble venció por enésima vez a Portugal cuatro goles a dos. Ya sea que anoten un gol o que lo encajen, los teutones permanecen impávidos como si nada hubiera ocurrido, dando la impresión de que no era Portugal el equipo a quien estaban enfrentando, cuando hicieron el cuarto gol pensamos que irían por el quinto y el sexto, pero ellos continuaron con su ritmo pausado, fieles a su filosofía, plenamente convencidos de que los goles son consecuencia de jugar bien, así, sin preocupaciones, esperan pacientemente a que los goles vayan cayendo. Cuando Portugal anotó el segundo gol, los narradores del juego esperaban una rabiosa reacción lusitana, sin embargo, los alemanes permanecieron igual, como si nada hubiese ocurrido.

Mientras tanto, en Sevilla, España recibió a Polonia. Los españoles jugaron con: Unai Simón, Marco Llorente, Pau Torres, Jordi Alva, Koke Resurrección, Pedri, Rodri, Dany Olmo, Gerard Moreno y Alvaro Morata... Polonia: Sczesny, Bednarek Glik, Bereeszynski, Puchacz, Klich, Moder, Jozwiak, Zielinski, Swiderski y Lewandowski. Obviamente que el juego corto de España le concedió la mayor posesión de balón en un porcentaje bastante alto, lo que produjo una mayor actividad en el área polaca, sin embargo, España continuó mostrando la misma falta de gol que hasta ahora ha exhibido. Sin embargo fueron los que ahora vistieron de rojo (los dos equipos son rojos) España, los primeros en anotar, siendo Álvaro Morata quien después de tantas oportunidades erradas logró acertar.

Durante la primera parte todo hizo pensar que Polonia sería fácil presa, pero sobre la base de su tozudez más que cualquier técnica, fueron no apropiándose del terreno, pero sí llegando con cierta frecuencia hasta el área española estrellando un balón en los postes. Se jugaba el minuto 25 cuando un mal tiro de Gerard Moreno, que salió como un buscapies, fue cazado por Álvaro Morata a tan corta distancia que era imposible errar, poniendo a España arriba. Así continuó el partido en medio de una gran intermitencia, en donde el balón iba de una puerta a la otra hasta que al minuto 52 Robert Lewandowski con uno de sus acostumbrados cabezazos puso el balón lejos de Simón para sentenciar el partido. España tendrá que vencer a República Checa y Polonia a Suecia, si es que desean continuar.

Hasta pronto amigo.

Los polacos se las verán con Suecia y los ibéricos con Eslovaquia.

La preparación táctica es la fase en la que el entrenador introduce sistemas, esquemas o módulos en su equipo, para lograr el perfecto acoplamiento entre todas las líneas de juego -defensa, centro del campo y ataque-, procurando lograr el máximo rendimiento en la competición. Cuando se prepara tácticamente a un equipo de futbol y de cualquier deporte colectivo siempre se ha de procurar que los sistemas se ajusten a las capacidades de los jugadores y nunca intentar adaptar a los jugadores al sistema. Con ello se logrará siempre el mejor rendimiento según la capacidad natural de cada uno.

La preparación táctica se rige por tres principios fundamentales: potencia del juego de ataque, velocidad de ejecución y de movimiento y, control del adversario y desmarque propio. El fin principal de un equipo de futbol es el gol; para conseguirlo hay que atacar y para atacar hay que poseer una determinada velocidad de ejecuciones y movimiento y el saber trasladarse de la fase defensiva -control del adversario- a la ofensiva -desmarque propio-. Las llamadas transiciones defensa ataque y ataque defensa constituyen la parte más importante de los sistemas tácticos y en ella cada entrenador debe trabajar con los elementos que tiene a su disposición.

Se exigirán para desarrollar una potencia de ataque realmente competitiva, una perfecta sincronización en los intercambios de puestos -velocidad de ejecución- y un notable sentido de la anticipación -velocidad de movimiento-. Ambos se consiguen en la práctica diaria del entrenamiento, aunque las dos partes se diferencian porque la velocidad de ejecución es un movimiento mecánico (por consiguiente asimilable a través de la práctica por todo jugador), mientras que el sentido de la anticipación depende no solo de la capacidad de ocupar la posición correcta, sino también de la inteligencia del jugador y de su capacidad atlética.

Generalmente cuando se habla de la táctica se piensa en la magia del entrenador que será capaz con su intuición, de desbaratar los planes de su rival. En realidad la preparación táctica requiere un estudio exhaustivo de las características del propio equipo y del equipo rival, que no siempre será el mismo.

Y todo esto que les cuento, es lo que nos mostró hoy el equipo alemán, que con una frialdad increíble venció por enésima vez a Portugal cuatro goles a dos. Ya sea que anoten un gol o que lo encajen, los teutones permanecen impávidos como si nada hubiera ocurrido, dando la impresión de que no era Portugal el equipo a quien estaban enfrentando, cuando hicieron el cuarto gol pensamos que irían por el quinto y el sexto, pero ellos continuaron con su ritmo pausado, fieles a su filosofía, plenamente convencidos de que los goles son consecuencia de jugar bien, así, sin preocupaciones, esperan pacientemente a que los goles vayan cayendo. Cuando Portugal anotó el segundo gol, los narradores del juego esperaban una rabiosa reacción lusitana, sin embargo, los alemanes permanecieron igual, como si nada hubiese ocurrido.

Mientras tanto, en Sevilla, España recibió a Polonia. Los españoles jugaron con: Unai Simón, Marco Llorente, Pau Torres, Jordi Alva, Koke Resurrección, Pedri, Rodri, Dany Olmo, Gerard Moreno y Alvaro Morata... Polonia: Sczesny, Bednarek Glik, Bereeszynski, Puchacz, Klich, Moder, Jozwiak, Zielinski, Swiderski y Lewandowski. Obviamente que el juego corto de España le concedió la mayor posesión de balón en un porcentaje bastante alto, lo que produjo una mayor actividad en el área polaca, sin embargo, España continuó mostrando la misma falta de gol que hasta ahora ha exhibido. Sin embargo fueron los que ahora vistieron de rojo (los dos equipos son rojos) España, los primeros en anotar, siendo Álvaro Morata quien después de tantas oportunidades erradas logró acertar.

Durante la primera parte todo hizo pensar que Polonia sería fácil presa, pero sobre la base de su tozudez más que cualquier técnica, fueron no apropiándose del terreno, pero sí llegando con cierta frecuencia hasta el área española estrellando un balón en los postes. Se jugaba el minuto 25 cuando un mal tiro de Gerard Moreno, que salió como un buscapies, fue cazado por Álvaro Morata a tan corta distancia que era imposible errar, poniendo a España arriba. Así continuó el partido en medio de una gran intermitencia, en donde el balón iba de una puerta a la otra hasta que al minuto 52 Robert Lewandowski con uno de sus acostumbrados cabezazos puso el balón lejos de Simón para sentenciar el partido. España tendrá que vencer a República Checa y Polonia a Suecia, si es que desean continuar.

Hasta pronto amigo.