/ sábado 12 de septiembre de 2020

Ocurrencias del futbol | Las palabras de los sabios son oídas en silencio más que los gritos de un príncipe entre tontos

Con días en los que no tenemos más que ver en TV, que esos programas noticiosos deportivos, que a causa del confinamiento, se realizan con los comentaristas actuando desde sus hogares; para un profano como yo, no me queda más que aplaudir a los técnicos de las televisoras, que no puedo imaginar el circo que tienen que hacer para que llegue hasta nuestro encierro, aquello que está ocurriendo en el mundo.

Ni siquiera imaginando las dificultades que resulta coordinar las peroratas de los habladores, que para imponer sus juicios, hablan y hablan todos a una vez, hacerlo a distancia como podemos ver no es imposible, pero el resultante es ese tormentoso momento que hemos de soportar con tal de estar informados, lo cual agradecemos con mucho gusto.

Y claro, siendo los jugadores la materia prima de estos programas, los comentaristas, realizando su trabajo se llevan entre las patas a los primeros actores, lastimando su dignidad con la consiguiente justificada reclamación. ¡Ah! pero mucho cuidado, que si el jugador se molesta porque su trabajo es criticado, en su reclamo ha de estar seguro de no poner en tela de juicio el proceder de un comentarista, porque esa crítica no tocará solo al comentarista, sino al periodismo en general, que ofendido, aplastará inmisericorde al iluso “jugadorcillo” que no posee autocrítica.

Y bueno, ya saben ustedes quienes son los actores del momento. En primer lugar Lionel Messi, que no sé en qué demonios puede afectarnos a los mexicanos que el argentino quiera o no quiera jugar con el Barcelona. También tenemos la fabricación de ilusiones, en donde a Jiménez ya lo vemos jugando al lado de Cristiano Ronaldo y a Juan José Macías desvelándose pensando en una elección, ¿Con quién me iré, el Liverpool, el Real Madrid o el París Saint Germain? ¡Por favor! si nadie ha preguntado por ellos.

Pero lo más destructivo, es que al perro más flaco le carguen las pulgas. Toño Rodríguez ha venido teniendo muy buenas actuaciones desde que estuvo con Lobos e, incluso las ha tenido también con las Chivas, peeero, se equivocó una vez y, pasó a ser la causa de que ese grandioso equipo eternamente ganador, se encuentre en este momento como está. Atención Chivas, el dogma se resquebraja, el principal sustento que los mantenía en la cumbre (los comentaristas), ahora les dan la espalda.

La joya del momento, el que pronto marcharía a Europa siguiendo la huella del Chicharito, ahora es blanco de los “dardos envenenados” de sus otrora incondicionales... ¿Cómo es posible que un jugador chiva falle dos penales consecutivamente?... ¿Olvidarán estos “perfectos” que Martín Palermo erró tres en un mismo juego, sin dejar de ser un extraordinario jugador? y que Pelé, Maradona, Messi, Cristiano Ronaldo, Jiménez, Platini, Hugo Sánchez, Sócrates, Falcao, erraron penales en juegos importantes, sin que dejaran de ser reconocidos como extraordinarios jugadores.

Pero ahora se la han tomado contra aquellos a los que el tiempo no ha perdonado y, que ellos mismos alentaron para que no se fueran, jugadores cuya gloria quedó para la historia y, que lo mejor sería el retiro, como son Javier “Chicharito” Hernández y Oribe Peralta, a quienes se critica acremente por “fracasar” uno en Chivas y el otro en la MLS, jugadores ejemplares que lo dejaron todo en la cancha y, que alentados por los mismos que ahora los critican, están intentando luchar contra el único invencible, el tiempo y, que para colmo de ellos mismos, se han atrevido a cuestionar la positividad de sus comentarios, lo que les ha valido su desprecio.

No es posible que dos jugadores sean la causa de un bajo rendimiento que no es de ahora, las camisetas no juegan. La grandeza de las Chivas se ha sustentado de un equipo que hace ya mucho tiempo que dejó de existir y, que para mí es irrepetible, el que en aquel tiempo sus jugadores fueran los mejores de México, no quiere decir que sus sucesores lo sigan siendo, creerlo así constituye el dogma del que han vivido hasta la fecha, ya quisieran los Pumas, el Cruz Azul y el América, a los jugadores mexicanos que tienen las Chivas y sin embargo no ha pasado nada.

¡Ah! entonces lo que pasa es que los entrenadores son los que no sirven... ¿Cómo? Cruyff, Daniel Guzmán, Eduardo de la Torre, Hans Westherhof, Benjamín Galindo, Juan Carlos Ortega, Xabier Azkargorta, José Manuel de la Torre (Campeón 2006), Efraín Flores, Raúl Arias, José Luis Real, Ignacio Ambriz, John van't Schip, Ricardo Lavolpe, Matías Almeyda (Campeón 2017), Tomás Boy, José Cardozo, Luis Fernando Tena y Víctor Manuel Vucetich. ¡Vaya que el conocimiento futbolístico ha descansado por largo tiempo en la banca de las Chivas!

Bueno, conscientes de que las camisetas no juegan, nos dispondremos a disfrutar de la jornada 10 del Guardianes 2020, esperando que, a punto de conocer la nueva lista de jugadores convocados para ser observados por el Tata Martino, no se repitan accidentes dramáticos como el que acaba de sufrir Jorge “Burrito” Hernández, capitán del Pachuca y, que sigan apareciendo jóvenes valores en todos los equipos.

Hasta pronto amigo.

Con días en los que no tenemos más que ver en TV, que esos programas noticiosos deportivos, que a causa del confinamiento, se realizan con los comentaristas actuando desde sus hogares; para un profano como yo, no me queda más que aplaudir a los técnicos de las televisoras, que no puedo imaginar el circo que tienen que hacer para que llegue hasta nuestro encierro, aquello que está ocurriendo en el mundo.

Ni siquiera imaginando las dificultades que resulta coordinar las peroratas de los habladores, que para imponer sus juicios, hablan y hablan todos a una vez, hacerlo a distancia como podemos ver no es imposible, pero el resultante es ese tormentoso momento que hemos de soportar con tal de estar informados, lo cual agradecemos con mucho gusto.

Y claro, siendo los jugadores la materia prima de estos programas, los comentaristas, realizando su trabajo se llevan entre las patas a los primeros actores, lastimando su dignidad con la consiguiente justificada reclamación. ¡Ah! pero mucho cuidado, que si el jugador se molesta porque su trabajo es criticado, en su reclamo ha de estar seguro de no poner en tela de juicio el proceder de un comentarista, porque esa crítica no tocará solo al comentarista, sino al periodismo en general, que ofendido, aplastará inmisericorde al iluso “jugadorcillo” que no posee autocrítica.

Y bueno, ya saben ustedes quienes son los actores del momento. En primer lugar Lionel Messi, que no sé en qué demonios puede afectarnos a los mexicanos que el argentino quiera o no quiera jugar con el Barcelona. También tenemos la fabricación de ilusiones, en donde a Jiménez ya lo vemos jugando al lado de Cristiano Ronaldo y a Juan José Macías desvelándose pensando en una elección, ¿Con quién me iré, el Liverpool, el Real Madrid o el París Saint Germain? ¡Por favor! si nadie ha preguntado por ellos.

Pero lo más destructivo, es que al perro más flaco le carguen las pulgas. Toño Rodríguez ha venido teniendo muy buenas actuaciones desde que estuvo con Lobos e, incluso las ha tenido también con las Chivas, peeero, se equivocó una vez y, pasó a ser la causa de que ese grandioso equipo eternamente ganador, se encuentre en este momento como está. Atención Chivas, el dogma se resquebraja, el principal sustento que los mantenía en la cumbre (los comentaristas), ahora les dan la espalda.

La joya del momento, el que pronto marcharía a Europa siguiendo la huella del Chicharito, ahora es blanco de los “dardos envenenados” de sus otrora incondicionales... ¿Cómo es posible que un jugador chiva falle dos penales consecutivamente?... ¿Olvidarán estos “perfectos” que Martín Palermo erró tres en un mismo juego, sin dejar de ser un extraordinario jugador? y que Pelé, Maradona, Messi, Cristiano Ronaldo, Jiménez, Platini, Hugo Sánchez, Sócrates, Falcao, erraron penales en juegos importantes, sin que dejaran de ser reconocidos como extraordinarios jugadores.

Pero ahora se la han tomado contra aquellos a los que el tiempo no ha perdonado y, que ellos mismos alentaron para que no se fueran, jugadores cuya gloria quedó para la historia y, que lo mejor sería el retiro, como son Javier “Chicharito” Hernández y Oribe Peralta, a quienes se critica acremente por “fracasar” uno en Chivas y el otro en la MLS, jugadores ejemplares que lo dejaron todo en la cancha y, que alentados por los mismos que ahora los critican, están intentando luchar contra el único invencible, el tiempo y, que para colmo de ellos mismos, se han atrevido a cuestionar la positividad de sus comentarios, lo que les ha valido su desprecio.

No es posible que dos jugadores sean la causa de un bajo rendimiento que no es de ahora, las camisetas no juegan. La grandeza de las Chivas se ha sustentado de un equipo que hace ya mucho tiempo que dejó de existir y, que para mí es irrepetible, el que en aquel tiempo sus jugadores fueran los mejores de México, no quiere decir que sus sucesores lo sigan siendo, creerlo así constituye el dogma del que han vivido hasta la fecha, ya quisieran los Pumas, el Cruz Azul y el América, a los jugadores mexicanos que tienen las Chivas y sin embargo no ha pasado nada.

¡Ah! entonces lo que pasa es que los entrenadores son los que no sirven... ¿Cómo? Cruyff, Daniel Guzmán, Eduardo de la Torre, Hans Westherhof, Benjamín Galindo, Juan Carlos Ortega, Xabier Azkargorta, José Manuel de la Torre (Campeón 2006), Efraín Flores, Raúl Arias, José Luis Real, Ignacio Ambriz, John van't Schip, Ricardo Lavolpe, Matías Almeyda (Campeón 2017), Tomás Boy, José Cardozo, Luis Fernando Tena y Víctor Manuel Vucetich. ¡Vaya que el conocimiento futbolístico ha descansado por largo tiempo en la banca de las Chivas!

Bueno, conscientes de que las camisetas no juegan, nos dispondremos a disfrutar de la jornada 10 del Guardianes 2020, esperando que, a punto de conocer la nueva lista de jugadores convocados para ser observados por el Tata Martino, no se repitan accidentes dramáticos como el que acaba de sufrir Jorge “Burrito” Hernández, capitán del Pachuca y, que sigan apareciendo jóvenes valores en todos los equipos.

Hasta pronto amigo.