A principios del año pasado, investigadores de equipo de la Northwestern Universitycaptaron en video la colisión y fusión de nanopartículas orgánicas. Esta visión incomparable de la "química en movimiento" ayudará a los nanocientíficos de la Universidad a desarrollar técnicas innovadoras de administración de medicamentos y también a mostrar a los científicos de todo el mundo la forma en que un método de imagenología emergente arroja luz sobre un mundo muy pequeño.
Como si los ciudadanos del planeta Tierra no tuviéramos con toda la problemática que encierra el fenómeno del Cambio Climático. La misma Universidad de Estados Unidos, en Chicago, a través de un grupo de hombres de ciencia, dirigidos por el Dr. Alessandro Rotta Loria, dio a conocer hace unos días la existencia del “Cambio Climático Subterráneo”.
Para llegar a esa interesantísima conclusión, primeramente, los científicos instalaron una red inalámbrica con más de 150 sensores de temperatura en Chicago Loop, un área comunitaria del distrito financiero, sede del gobierno de Chicago y del condado de Cook, zona de teatros y tiendas. Lo mismo hicieron en el parque más importante de Chicago, Grant Park, para comparar la temperatura. El sector de parque y jardines está ubicado entre la Avenida Michigan y el lago del mismo nombre, en el centro de la ciudad. Un sector con senderos, atractivos naturales y culturales, entre ellos la estatua de Cristóbal Colón y el monumento a Abraham Lincoln, sitios en donde se arremolinan cientos de turistas a tomarse la acostumbrada selfie.
Cuando los expertos en ciencia estudiaron los datos arrojados a través del equipo técnico, se dieron cuenta que las temperaturas subterráneas en el barrio de Chicago eran hasta 10 grados más cálidas que las del Grant Park.
Por debajo de la tierra
El “Cambio Climático Subterráneo” implica cambios en el subsuelo y de acuerdo a la información de los científicos que elaboraron el estudio, no tiene nada que ver con el cambio climático de la superficie. Aunque sí es otra muestra del impacto humano en la Tierra. Las primeras investigaciones sobre el “Cambio Climático Subterráneo” comenzaron hace unos 25 años, aunque no con argumentos concluyentes como ahora se dan a conocer.
Es bien sabido, en zonas urbanas del mundo, países además de Estados Unidos, Japón, Inglaterra, Alemania, China etc. el calor se difunde constantemente desde sótanos, sistemas de transporte subterráneo, aparcamientos, redes de calefacción y los propios materiales de construcción, que absorben y retienen calor durante el día y lo liberan durante la noche. Es por ello quelas ciudades están más expuestas a las consecuencias de este fenómeno, no así con esta magnitud las zonas rurales.
Las variaciones de temperatura pueden afectar el crecimiento normal de las plantas, la forma en que fluye el agua subterránea, la salud de las personas y el estado de las vías de transporte subterráneo, provocando disrupciones costosas cada año.
Cada ciudad necesitaría una evaluación individual e investigaciones, pero en el caso de América Latina, Rotta Loria apunta que “las más densas, sobre terrenos inestables y blandos, serán más propensas a sufrir daños producto del “Cambio Climático Subterráneo”.
Con suma razón Rotta Loria ahora y a partir del estudio, solicita que las nuevas construcciones tengan en cuenta este fenómeno para que las estructuras sean más resistentes y se mitiguen sus peligros a largo plazo. Asimismo, sugiere la instalación de aislantes térmicos en edificios existentes para minimizar la cantidad de calor que entra al subsuelo. No cabe duda que aún resta saber que otras situaciones nos depara el futuro, producto de la inconsciencia del ser humano. Hoy tenemos información por un reciente estudio, tras una observación satelital de 21 años, que las altas temperaturas de los mares influyen en su coloración además de alterar los ecosistemas marinos. O también, la angustia psicológica asociada con la amenaza percibida del cambio climático se vincula a un peor bienestar mental. Entre otros asuntos.
No resolvemos aún el problema de mitigación del cambio Climático, cuándo ya tenemos una nueva problemática en qué pensar.
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