El secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) hizo un llamado a hacer que el 2024 sea un año en el que se fomente la confianza y la esperanza en todo lo que la humanidad puede conseguir unida. En su mensaje de Año Nuevo, António Guterres lamentó la aflicción que asuela a la gente en todo el mundo tras un 2023 de “enorme sufrimiento, violencia y caos climático”.
Guterres no está alejado de la realidad, este año la comunidad mundial desafió al planeta al elevar la temperatura y hacer de 2023 el año más caluroso jamás registrado. Y no solo eso, a la temperatura inimaginable se le unieron factores sociales como la pobreza y el hambre. El Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) publicó este 14 de julio un nuevo informe en el que señaló que, entre 2020 y 2023, alrededor de 165 millones de personas han caído debajo del umbral de pobreza. La ONU subraya que la situación se disparó en los últimos años en medio de crisis como la pandemia del Covid-19 y la guerra en Ucrania.
Personas en situación de pobreza
El preocupante panorama significa que más del 20% de la población global, alrededor de mil 650 millones de ciudadanos, actualmente viven con menos de 3.65 dólares al día, luchando por conseguir alimentos a diario. Y aquellos en extrema pobreza intentan sobrevivir con un promedio de2.15 dólares diarios. Los 165 millones de personas en situación de pobreza se encuentran en países de ingresos bajos o medianos bajos.
El ingeniero físico y electrónico, portugués de 74 años, en su último discurso del año, mencionó también: “El 2024 ha de ser un año de restauración de la confianza, -cuando vemos que esta se ha perdido-, y la esperanza. Debemos salvar nuestras diferencias en aras de soluciones comunes”.
Otra de las causas más relevantes de la pobreza en el mundo es el problema de la deuda externa. A grandes rasgos, es la cantidad que debe un país a sus acreedores internacionales como consecuencia de los préstamos que ha recibido.
La deuda externa de los países pobres con sus deudores del primer mundo supone un grave obstáculo con miras a una solución de su situación. Los países en desarrollo pagaron una cifra récord de USD 443 mil 500 millones en deuda pública en 2022. El aumento de los costos llevó a que se desviaran recursos escasos y se desatendieron necesidades críticas.
Deuda externa impagable
En reciente fecha el Banco Mundial publicó un documento titulado International Debt Report (Informe sobre la deuda internacional): “Cada trimestre que las tasas de interés se mantienen altas, más países en desarrollo se ven afectados y se enfrentan a la difícil decisión de elegir entre pagar la deuda pública o invertir en salud pública, educación e infraestructura”.
En medio de las consecuencias por las crisis,los aumentos en las tasas de interés hacen que las naciones más pobres ahora gasten el doble o el triple de sus ingresos en el servicio de la deuda, en comparación con las más ricas. Y alrededor de 2.3 veces más en pagos de intereses que en asistencia social. Particularmente para los países de bajos ingresos la carga de la deuda se ha vuelto insostenible.
Por ello es que la ONU ha instado a los ministros de finanzas del mundo a conceder a los países pobres "una pausa" en el pago de la deuda.
En días pasados Israel bombardeó el centro de Gaza por mar, tierra y aire; el Ejército de Israel atacó varios puntos en Siria tras el lanzamiento de dos cohetes hacia su territorio, y las guerras en África continúan. Aun así, el líder de la ONU, António Guterres habla de seguir esforzándose mirando a conseguir la paz. Y aunque no ve clara la postura de los países desarrollados y organismos financieros de cooperación para combatir la pobreza, aseguró su empeño de peldaños hacia el Desarrollo Sostenible y los Derechos Humanos.
Estimado lector, le deseo que el 2024 vea culminado sus esfuerzos en amor, salud y paz. Y espero verlo cada domingo en este espacio, si es que el Creador así lo decide. ¡Feliz Año Nuevo!
lupitarico@hotmail.com
