Esta semana asistí a un curso antes de iniciar el semestre escolar. La actividad versaba sobre temas concernientes al desarrollo de una investigación. Entre el bagaje de conocimientos que abordamos los presentes, incursioné haciendo comentarios sobre el modelo económico que mundialmente se ha venido desarrollando a lo largo de décadas y que arroja algo así como el 1% de la población que ostenta la mayor parte del dinero del mundo.
Oxfam internacional dice al respecto: “Es hora de plantear una alternativa. Necesitamos Gobiernos que apuesten por una visión de futuro y respondan ante su ciudadanía primero, grandes empresas que antepongan los intereses de trabajadores y productores, un crecimiento dentro de los límites del planeta, el respeto de los derechos de las mujeres, y que el sistema fiscal sea justo y progresivo. Es posible avanzar hacia una economía más humana”.
Hace unos días murió un “Tiburón”, Carlos Bremer Gutiérrez. La verdad es que yo jamás había escuchado hablar de él hasta que comencé a ver el programa de Shark Tank, un reality de entretenimiento en donde personas de todas las edades podían presentar su proyecto emprendedor ante 4 inversionistas y que éstos a cambio de un porcentaje de sus ganancias ofrecían invertir una cantidad de dinero para hacer que el negocio prosperara.
El negocio de las hamacas
Lander Calderón acudió a Shark Tank México, el emprendedor presentó un plan sobre hamacas yucatecas. Calderón al estar en contacto con artesanos mexicanos de comunidades de la península como Tixkokob y Ekmul, se dio cuenta del trabajo que había detrás de sus artesanías. Crear una hamaca, por ejemplo, tomaba desde semanas hasta meses. Por ello cuando decidió iniciar su negocio buscó que también fuera una forma de hacer conciencia con el público.
El sentido del diseño hizo que Bremer de inmediato no lo pensara dos veces y se adelantara a proponer los 400 mil pesos por el 40% de la idea. Su argumento fue, “me encantará difundir la venta de este trabajo artesanal mexicano para darlo a conocer en el país y el extranjero. La verdad es que hay hamacas en todo el mundo, pero vamos a hacerlo por México, además estoy seguro que también nos acompañará el “Canelo” Álvarez, quien me dijo recientemente que en cuanto hubiera un proyecto de esta índole contara con su apoyo, ¡vamos a hacerlo que también le entre!
¡Así era Bremer!, un hombre de negocios con visión social.
El presidente Andrés Manuel López Obrador en una conferencia mañanera tuvo de invitado al empresario a quien luego de una introducción alabando la historia altruista del neoleonés, lo presentó por haber adquirido la casa de Zhenli Ye Gon, dinero que fue destinado para apoyar a los atletas mexicanos que participaron en los Juegos Panamericanos de Lima 2019. Posteriormente se supo que la suma ascendió a 102 millones de pesos.
Y bueno, vaya que hasta a Luis Miguel ayudó.
Comentó cómo entre varios amigos empresarios decidieron apoyar económicamente al cantante. “A mí me tocó hacer el plan para saber cómo revivir a este gran ídolo de México. También ofrecí financiarlo, pero no fue necesario con el esquema que se hizo fue suficiente”.
Aumentaron los millonarios en México
De 2021 al 2022, la concentración de la riqueza en México en el 1% por ciento más rico disminuyó, ya que el número de personas consideradas millonarias pasó de 323 a 393, lo que significa que en sólo un año ésta se concentró en más manos, de acuerdo con el Reporte de Riqueza Global 2023, Perspectivas líderes para navegar el futuro que llevó a cabo Credit Suisse y UBS.
Vamos a extrañar a Bremer, no solo por su agradable imagen y simpatía serena que transmitía a través del programa, y que sigue circulando a través de las redes sociales, sino por su bonhomía, carácter, comportamiento de servir a la sociedad. Es necesario y fundamental que en México se dé la economía social y solidaria a través de las empresas y organizaciones (cooperativas, mutuales sociales, asociaciones, fundaciones y empresas) que produzcan bienes, servicios y conocimientos que atienden las necesidades de la comunidad a la que sirven, con objeto de lograr objetivos de una sociedad cada vez más igualitaria.
Descanse en paz un “Tiburón” con vocación de servicio.
lupitarico@hotmail.com
