/ domingo 24 de octubre de 2021

Liberándose del alcohol | Autocrítica rigurosa

“Para nosotros, lo necesario es hacer un examen constante de nuestros puntos fuertes y débiles, y tener un sincero deseo de aprender y crecer por este medio. Los alcohólicos hemos aprendido esta lección por la dura experiencia. Claro está que, en todas las épocas y en todas partes del mundo, personas más experimentadas que nosotros se han sometido a una crítica rigurosa.”

El inventario o examen autocrítico de la vida de un alcohólico anónimo es otra poderosa herramienta que propone el programa de recuperación de los Doce Pasos para adquirir y mantener el estado de sobriedad. Hay cuatro tipos de inventario y se distinguen entre sí por el factor tiempo. El primero es el Instantáneo, que se puede hacer a cualquier hora del día, cuando vemos que nos estamos conflictuando. Hay otro que lo hacemos al final del día, cuando repasamos los sucesos de las últimas horas. Revisamos los aciertos y errores de nuestra conducta, el tercer tipo de inventario la hacemos con la ayuda de nuestro asesor o padrino y es por un período de dos o tres meses y el cuarto es una revisión general que se puede hacer anual en el mes de diciembre. El propósito de esta herramienta es aprender de nosotros mismos y crecer. Lo podemos resumir en la siguiente frase: detecto, admito y corrijo.

Hay opiniones diversas sobre esta herramienta, unas dicen que es dedicarle mucho tiempo y que no se dispone de él porque ya está destinado a otras cosas más importantes. Quienes así opinan es que no lo han hecho. La realidad es que quienes lo practican con perseverancia solo le dedican unos pocos minutos. Lo cierto es que nunca se comparará con el tiempo que le dedicaba uno a consumir bebidas alcohólicas, en el que desafortunadamente se llegan a consumir hasta noches enteras.

“Considerado desde un punto espiritual, es axiomático que cada vez que nos sentimos trastornados, sea cual sea la causa, hay algo que anda mal en nosotros. Si alguien nos ofende y nos enfadamos, también nosotros andamos mal. ¿Pero acaso no hay ninguna excepción a esta regla?, ¿acaso no podemos sentirnos justificadamente airados con la gente hipócrita? Para nosotros los alcohólicos, estas excepciones son peligrosas. Hemos llegado a darnos cuenta de que la ira justificada debe dejarse a gente mejor capacitada que nosotros para manejarla” (12 Pasos Pág. 62)

“Un inventario instantáneo, si lo hacemos en medio de una perturbación parecida, puede contribuir mucho a apaciguar nuestras emociones borrascosas. Nuestros inventarios instantáneos se aplican principalmente a las circunstancias imprevistas que surgen el vivir diario”

“En todas estas situaciones tenemos que ejercer un dominio de nosotros mismos, hacer un análisis de todo lo que entra en juego, y cuando la culpa es nuestra, estar dispuestos a admitirlo y, cuando no lo es, igualmente dispuestos a perdonar. No tenemos por qué sentirnos descorazonados si recaemos en los errores de nuestras viejas costumbres. No es fácil practicar esta disciplina. No vamos a aspirar a la perfección, sino al progreso” (12 Pasos Pág.63)

Para quienes en verdad quieren cambiar de vida, además de ya no consumir alcohol, esta es una herramienta muy efectiva. Porque además del esfuerzo personal A.A. ofrece la ayuda del Grupo, del Padrino y de la Literatura. En un ambiente de amistad y de cordialidad. Se trabaja en unidad para ser una mejor persona de manera integral.

Si tú tienes el problema del alcoholismo, conviértelo en un impulsor de una mejor vida sin alcohol. Marca los números 833 2125634, 833 2166058 o el 833 2289003. Ahí te orientarán.

“Para nosotros, lo necesario es hacer un examen constante de nuestros puntos fuertes y débiles, y tener un sincero deseo de aprender y crecer por este medio. Los alcohólicos hemos aprendido esta lección por la dura experiencia. Claro está que, en todas las épocas y en todas partes del mundo, personas más experimentadas que nosotros se han sometido a una crítica rigurosa.”

El inventario o examen autocrítico de la vida de un alcohólico anónimo es otra poderosa herramienta que propone el programa de recuperación de los Doce Pasos para adquirir y mantener el estado de sobriedad. Hay cuatro tipos de inventario y se distinguen entre sí por el factor tiempo. El primero es el Instantáneo, que se puede hacer a cualquier hora del día, cuando vemos que nos estamos conflictuando. Hay otro que lo hacemos al final del día, cuando repasamos los sucesos de las últimas horas. Revisamos los aciertos y errores de nuestra conducta, el tercer tipo de inventario la hacemos con la ayuda de nuestro asesor o padrino y es por un período de dos o tres meses y el cuarto es una revisión general que se puede hacer anual en el mes de diciembre. El propósito de esta herramienta es aprender de nosotros mismos y crecer. Lo podemos resumir en la siguiente frase: detecto, admito y corrijo.

Hay opiniones diversas sobre esta herramienta, unas dicen que es dedicarle mucho tiempo y que no se dispone de él porque ya está destinado a otras cosas más importantes. Quienes así opinan es que no lo han hecho. La realidad es que quienes lo practican con perseverancia solo le dedican unos pocos minutos. Lo cierto es que nunca se comparará con el tiempo que le dedicaba uno a consumir bebidas alcohólicas, en el que desafortunadamente se llegan a consumir hasta noches enteras.

“Considerado desde un punto espiritual, es axiomático que cada vez que nos sentimos trastornados, sea cual sea la causa, hay algo que anda mal en nosotros. Si alguien nos ofende y nos enfadamos, también nosotros andamos mal. ¿Pero acaso no hay ninguna excepción a esta regla?, ¿acaso no podemos sentirnos justificadamente airados con la gente hipócrita? Para nosotros los alcohólicos, estas excepciones son peligrosas. Hemos llegado a darnos cuenta de que la ira justificada debe dejarse a gente mejor capacitada que nosotros para manejarla” (12 Pasos Pág. 62)

“Un inventario instantáneo, si lo hacemos en medio de una perturbación parecida, puede contribuir mucho a apaciguar nuestras emociones borrascosas. Nuestros inventarios instantáneos se aplican principalmente a las circunstancias imprevistas que surgen el vivir diario”

“En todas estas situaciones tenemos que ejercer un dominio de nosotros mismos, hacer un análisis de todo lo que entra en juego, y cuando la culpa es nuestra, estar dispuestos a admitirlo y, cuando no lo es, igualmente dispuestos a perdonar. No tenemos por qué sentirnos descorazonados si recaemos en los errores de nuestras viejas costumbres. No es fácil practicar esta disciplina. No vamos a aspirar a la perfección, sino al progreso” (12 Pasos Pág.63)

Para quienes en verdad quieren cambiar de vida, además de ya no consumir alcohol, esta es una herramienta muy efectiva. Porque además del esfuerzo personal A.A. ofrece la ayuda del Grupo, del Padrino y de la Literatura. En un ambiente de amistad y de cordialidad. Se trabaja en unidad para ser una mejor persona de manera integral.

Si tú tienes el problema del alcoholismo, conviértelo en un impulsor de una mejor vida sin alcohol. Marca los números 833 2125634, 833 2166058 o el 833 2289003. Ahí te orientarán.