/ miércoles 19 de septiembre de 2018

Ningún caballo se muere corriendo si no lleva jinete encima


Es así como perdieron su grandeza, tanto el Veracruz como el Atlas (69 y 67 años sin campeonar)


Está dicho que a todo nos acostumbramos. Así, hasta por esta estúpida forma de competición nos preocupamos y estamos pendientes y nos interesamos por una tabla de posiciones absurda que no nos indica nada. Un sistema hecho para que los mediocres disfruten las hazañas de Tigres, Guadalajara, Pachuca, Tijuana y Necaxa, de momento alejados del primer lugar, en un abrir y cerrar de ojos ya están en la cumbre con la calificación a la liguilla asegurada y, más aún, con mayores posibilidades de ser campeones.

Mediocre si, no cabe otro adjetivo que ese. En España la temporada pasada (2017-2018), el Real Madrid inició mal la primera vuelta y no le sirvió un semestre para alcanzar al Barcelona que le sacó 16 puntos de diferencia, lo que equivale a que en este momento se retomara el antiguo sistema de torneos largos a visita recíproca, entonces veríamos si Tigres, Monterrey, América o Toluca, se sentirían tan tranquilos pero no digamos Guadalajara, Pachuca y Tijuana, que son de los equipos que más recientemente se han coronado.

Repito, ¿a que equipo le preocupa que Cruz Azul aparezca al momento en el primer lugar de la tabla de posiciones? Si generalmente en México son pocas las veces que el que finaliza en primer lugar logra ganar la Liguilla. Cruz Azul 20, UNAM 17, América 17, Santos 17, Toluca 16, Monterrey 16, Tigres 14, Querétaro 14, conforman el grupo beneficiado por el sistema, pues a la fecha se ha jugado lo que sería la cuarta parte de un torneo largo que en ese momento aún no se sentían seguros ya que, allá se preocupan por un solo lugar, el primero, mientras que aquí es el octavo el anhelado. ¿Cómo la ven, hay diferencia o no? Y de toda esta mediocridad en la que pululan los jugadores extranjeros, hemos de encontrar a 22 jugadores acostumbrados a la mediocridad para conformar una selección que se enfrente a otras que sí compiten correctamente.

Después, tenemos otro grupo en el que se encuentran los que no necesitan del sistema para ser mediocres. El Guadalajara, que cree que su brillante historial le sirve para borrar esta pésima década que ha obligado a la FMF a desaparecer el descenso a ciertos equipos de historia como el Veracruz y el Atlas. En esta mediocridad acompañan a las Chivas, Querétaro, Puebla y Morelia, que tienen ya bastante tiempo navegando ahí junto al Necaxa y el León, que bastante han luchado por oscurecer su antigua brillantez.

Y cerramos con el grupo de los incomprensibles, grupo de tres en donde uno, Lobos, no tiene vela en el entierro, pues es de reciente ascenso con la suerte de ser favorecido por la protección que la FMF ha dado al Veracruz, Atlas, Puebla y Guadalajara. Los Tiburones fueron la sensación de fines de la década de los 40, siendo su último campeonato el ganado en 1949-1950, teniendo en la puerta al Ranchero Torres, Castañeda, Andrade, “Pelón” Silva, Rufino Lecca, Buenavad, Ortiz, Lupe Velázquez, Grimaldo González, Pirata Fuente y Julio Allyón “Negro Aparicio” (campeón goleador con 30 goles).

Un año antes jugaba para Veracruz Chito García, mánager del equipo de beisbol Tigres, a los que hizo campeones con puros jugadores mexicanos; Julián “Pachuco” Durán, para don Ignacio Trelles el mejor jugador que ha dado el futbol mexicano, dos jugadores de mucho carácter. El Chito fue castigado por darse de golpes con dos contrarios y un extraño que apareció en la revuelta, a los que dejó tendidos. El club lo castigó seis meses y Chito les dijo ahí nos vemos y se fue a jugar beisbol con los Tigres. El Pachuco cambió de equipo, Celaya y Zacatepec, y por su carácter rijoso fue asesinado en un bailongo. Estos Tiburones fueron dirigidos por Joaquín “Chavo” Urquiaga, que antes fuera campeón como portero.

El Atlas, por su parte, se coronó por última vez en la temporada 1950-1951 con jugadores como Raúl Córdova (extraordinario portero), “Chivo" Mercado, Felipe Velázquez, Felipe Zetter, Jesus “Chita” Aldrete, Adalberto “Dumbo” López, Edwin Cubero, Luis Ornelas, Guillermo del Valle, Javier Novello, José Novo, Juan “Chapetes” Gómez, etc., dirigidos por Eduardo Valdatti. Tuve suerte de ver jugar a este Atlas. Del Veracruz aquel, solamente me queda el recuerdo de lo que el “Viejo” Héctor Aparicio me platicaba de ellos.

Poco a poco la gloria de estos equipos se fue desvaneciendo, no así su futbol espectacular, sobre todo el de los Rojinegros del Atlas, que nadie puede comprender por qué razón les interesó más el vender jugadores que ganar campeonatos, siendo difícil recordar que hayan mantenido a los mismos jugadores por lo menos durante dos temporadas consecutivas. Todos reconocemos su brillante historial, pero consideramos injusto que la FMF premie evitando el descenso de equipos cuyas directivas no han sabido estar al mismo nivel de calidad que su equipo.


Hasta pronto amigo.



Es así como perdieron su grandeza, tanto el Veracruz como el Atlas (69 y 67 años sin campeonar)


Está dicho que a todo nos acostumbramos. Así, hasta por esta estúpida forma de competición nos preocupamos y estamos pendientes y nos interesamos por una tabla de posiciones absurda que no nos indica nada. Un sistema hecho para que los mediocres disfruten las hazañas de Tigres, Guadalajara, Pachuca, Tijuana y Necaxa, de momento alejados del primer lugar, en un abrir y cerrar de ojos ya están en la cumbre con la calificación a la liguilla asegurada y, más aún, con mayores posibilidades de ser campeones.

Mediocre si, no cabe otro adjetivo que ese. En España la temporada pasada (2017-2018), el Real Madrid inició mal la primera vuelta y no le sirvió un semestre para alcanzar al Barcelona que le sacó 16 puntos de diferencia, lo que equivale a que en este momento se retomara el antiguo sistema de torneos largos a visita recíproca, entonces veríamos si Tigres, Monterrey, América o Toluca, se sentirían tan tranquilos pero no digamos Guadalajara, Pachuca y Tijuana, que son de los equipos que más recientemente se han coronado.

Repito, ¿a que equipo le preocupa que Cruz Azul aparezca al momento en el primer lugar de la tabla de posiciones? Si generalmente en México son pocas las veces que el que finaliza en primer lugar logra ganar la Liguilla. Cruz Azul 20, UNAM 17, América 17, Santos 17, Toluca 16, Monterrey 16, Tigres 14, Querétaro 14, conforman el grupo beneficiado por el sistema, pues a la fecha se ha jugado lo que sería la cuarta parte de un torneo largo que en ese momento aún no se sentían seguros ya que, allá se preocupan por un solo lugar, el primero, mientras que aquí es el octavo el anhelado. ¿Cómo la ven, hay diferencia o no? Y de toda esta mediocridad en la que pululan los jugadores extranjeros, hemos de encontrar a 22 jugadores acostumbrados a la mediocridad para conformar una selección que se enfrente a otras que sí compiten correctamente.

Después, tenemos otro grupo en el que se encuentran los que no necesitan del sistema para ser mediocres. El Guadalajara, que cree que su brillante historial le sirve para borrar esta pésima década que ha obligado a la FMF a desaparecer el descenso a ciertos equipos de historia como el Veracruz y el Atlas. En esta mediocridad acompañan a las Chivas, Querétaro, Puebla y Morelia, que tienen ya bastante tiempo navegando ahí junto al Necaxa y el León, que bastante han luchado por oscurecer su antigua brillantez.

Y cerramos con el grupo de los incomprensibles, grupo de tres en donde uno, Lobos, no tiene vela en el entierro, pues es de reciente ascenso con la suerte de ser favorecido por la protección que la FMF ha dado al Veracruz, Atlas, Puebla y Guadalajara. Los Tiburones fueron la sensación de fines de la década de los 40, siendo su último campeonato el ganado en 1949-1950, teniendo en la puerta al Ranchero Torres, Castañeda, Andrade, “Pelón” Silva, Rufino Lecca, Buenavad, Ortiz, Lupe Velázquez, Grimaldo González, Pirata Fuente y Julio Allyón “Negro Aparicio” (campeón goleador con 30 goles).

Un año antes jugaba para Veracruz Chito García, mánager del equipo de beisbol Tigres, a los que hizo campeones con puros jugadores mexicanos; Julián “Pachuco” Durán, para don Ignacio Trelles el mejor jugador que ha dado el futbol mexicano, dos jugadores de mucho carácter. El Chito fue castigado por darse de golpes con dos contrarios y un extraño que apareció en la revuelta, a los que dejó tendidos. El club lo castigó seis meses y Chito les dijo ahí nos vemos y se fue a jugar beisbol con los Tigres. El Pachuco cambió de equipo, Celaya y Zacatepec, y por su carácter rijoso fue asesinado en un bailongo. Estos Tiburones fueron dirigidos por Joaquín “Chavo” Urquiaga, que antes fuera campeón como portero.

El Atlas, por su parte, se coronó por última vez en la temporada 1950-1951 con jugadores como Raúl Córdova (extraordinario portero), “Chivo" Mercado, Felipe Velázquez, Felipe Zetter, Jesus “Chita” Aldrete, Adalberto “Dumbo” López, Edwin Cubero, Luis Ornelas, Guillermo del Valle, Javier Novello, José Novo, Juan “Chapetes” Gómez, etc., dirigidos por Eduardo Valdatti. Tuve suerte de ver jugar a este Atlas. Del Veracruz aquel, solamente me queda el recuerdo de lo que el “Viejo” Héctor Aparicio me platicaba de ellos.

Poco a poco la gloria de estos equipos se fue desvaneciendo, no así su futbol espectacular, sobre todo el de los Rojinegros del Atlas, que nadie puede comprender por qué razón les interesó más el vender jugadores que ganar campeonatos, siendo difícil recordar que hayan mantenido a los mismos jugadores por lo menos durante dos temporadas consecutivas. Todos reconocemos su brillante historial, pero consideramos injusto que la FMF premie evitando el descenso de equipos cuyas directivas no han sabido estar al mismo nivel de calidad que su equipo.


Hasta pronto amigo.