El jugador media punta.
Hablamos y hablamos sobre la estrategia, la táctica y la técnica, pero, ¿sabemos bien de lo que estamos hablando? Como bien sabemos, "estrategia" es un término bélico, militar, que se refiere al buen uso de nuestras piezas para controlar el terreno de combate, mientras que por técnica nos referimos al buen uso de las herramientas para realizar una obra bien hecha y en el menor tiempo posible.
Jesús Manuel Corona "El Tecatito" y Mauro Lainez se clasifican como los extremos habilidosos que llevan la pelota pegada al pie para culminar su intervención con un centro a la inglesa, es decir retrasado, mejor conocido como el pase de la muerte. Otro tipo de extremo es el que se basa en una velocidad relampagueante, que reclama el pase en profundidad. Tal es el caso del "Pony" Ruiz, De Jonathan "Cabecita" Rodríguez, Uriel Antuna, Hirving "Chucky" Lozano.
Contrario a los antiguos extremos como Garrincha, de habilidad endiablada y, Gento, de velocidad endemoniada, han ido desapareciendo en la medida que se han acentuado los planteamientos defensivos, obligando al extremo a alternar el centro a la olla y el pase de la muerte, a incluir el remate a gol a pierna cambiada, o sea, que el extremo derecho recorte su avance al centro para buscar perfil de tiro y rematar.
Por eso es común que en la actualidad se hable de puntas y medias puntas, es decir, en lo más alto del ataque y de la mitad de la cancha en adelante. Y entre los jugadores en punta, diferenciar al ariete, centrado básicamente en el centro del ataque. Un caso especial que escapa sensiblemente a los moldes clásicos es el del media punta. Podría decirse que el media punta es una combinación del centro delantero y el centrocampista ofensivo, Alexis Vega, Luis Montes, Carlos Vela, etc.
Su zona de actuación se concreta de medio campo hacia adelante, evolucionando sin parar a la espera de ese balón que le permita superar a la defensa del oponente con la colaboración de sus compañeros más adelantados. Debe poseer la serenidad e inteligencia organizadora del centrocampista, la velocidad y capacidad de regate del extremo y la valentía y poder decisivo del delantero centro (ariete). Se trata pues de un jugador excepcional que necesita una total libertad de movimiento para desarrollar con plenitud todas sus habilidades futbolísticas.
El media punta tan pronto manda en profundidad a su compañero de ala, como intenta la penetrción individual o entra decididamente al remate. Debe ser, por tanto, un jugador completo. De alguna manera podría decir que el media punta es la denominación moderna del clásico interior de ataque que creó el histórico sistema de la WM. Haciendo un paralelismo los llamados medios volantes en aquel sistema vienen a ser los denominados centrocampistas defensivos de la actualidad, mientras los entonces interiores de ataque serían los centrocampistas creativos y organizadores o los medias puntas de ahora, en función de sus características más o menos goleadoras.
Existen casos especiales en el futbo mexicano, como Jonathan Rodríguez y Ángel Mena, que se significan como el extremo a pierna cambiada, que desborda hacia adentro buscando su perfil original para soltar su remate, haciéndolo con bastante éxito, tanto con sus respectivos clubes como con sus selecciones nacionales, Uruguay y Ecuador, en donde explotan su talento con bastante efectividad.
Buena parte de los grandes monstruos del futbol mundial han actuado como "media punta". El mismo Pelé, sin ser propiamente un clásico jugador de área, pero tampoco el típico centrocampista que organiza desde atrás, maravilló al mundo desde esta posición limitada por la línea central del terreno y la de gol. En ella Pelé interpretó celestialmente la música ofensiva del futbol, bien sorteando a tres, cuatro o hasta cinco defensores hasta marcar, bien pasando por inteligencia suprema el balón a otro compañero de vanguardia o bien culminando él mismo desde dentro o fuera del área.
Otro futbolista de color, el portugués Eusebio, compartió en Europa los honores estelares de Pelé, con más potencia de disparo que el rey brasileño. Eusebio era un ahombre de regate largo que cuando se lanzaba al ataque era casi imposible de frenar. Goleador nato, este portugués de Mozambique rescató partidos que se consideraban perdidos, como cuando en el Mundial de 1966 cuatro goles suyos remontaron el sorprendente 0-3 con el que Corea del Norte se había adelantado a Portugal, apenas transcurridos 20 minutos de la primera parte.
El mismo Kevin De Bruyne, jugador belga, medio volante ofensivo que actualmente milita en el equipo inglés, Manchester City, es otra muestra del jugador ideal para esta demarcación. Goleador unas veces, fabricante de victorias otras y director siempre, el belga es todo un bello espectáculo de juego atacante y como él Nicoló Barella de Italia, Lionel Messi de Argentina, Gerard Moreno de España, Riyad Marhez de Argelia, entre otros.
Hasta pronto amigo.
