Empató el Barcelona y, aunque se aleja un poco del Real Madrid, nada está escrito cuando faltan cinco juegos para el final...
Tal como lo dije en mi anterior columna, el Cholo Simeone, tiene un temple que lo contagia a sus jugadores... Dos veces se vieron abajo y, sin aspavientos, sin gritos, sin jalones de orejas, sus jugadores lograron reponerse para alcanzar a su rival.
En estos últimos partidos, hemos visto como el Barcelona perdió la claridad frente a gol, de la que antes hacía gala, algo incomprensible si nos damos cuenta de que en lo demás, todo sigue igual, aunque es obvio que para un equipo acostumbrado a contar siempre con marcadores muy ventajosos, al no tenerlos ahora, provoca en los jugadores un nerviosismo que les resta la eficacia de otras veces.
Hoy han tomado ventaja muy pronto sin que fueran ellos los autores del gol, correspondiendo a Costa en jugada desafortunada anotar en propia puerta, esto cuando corría el minuto 11.
Pero como suele ocurrir siempre que creemos que el Atlético de Madrid va a sucumbir, se levantan y van al ataque como si nada hubiera ocurrido, siendo el belga Yannikc Carrasco el causante del desaguisado en el área blaugrana, al provocar un falta que fue castigada con penal, que fue cobrado bien por Saúl Ñíguez y con ese marcador se van a descansar.
LA MISMA HISTORIA
Para la segunda parte, ninguno de los entrenadores modificaron sus alineaciones y, nuevamente, muy pronto vuelve el Barcelona a tomar ventaja, cuando Felipe Augusto de Almeida, llega tarde en una barrida cometiendo falta sobre Semedo, para que Messi engañe a Ovlak y retomar la ventaja. Y lo mismo, no entendemos cómo logra el Cholo Simeone, en tan pocas acciones, resquebrajar la defensiva contraria para salirse con la suya.
Nuevamente Yannikc Carrasco, el mejor jugador del encuentro, es trompicado para ir al suelo dentro del área culé, para que sin dudarlo el árbitro pite el penal, que nuevamente es cobrado por el especialista de los colchoneros, para sentenciar el empate.
Minutos antes de terminar el juego, Alvaro Morata puso en serio peligro al arco blaurana, cuando habilidosamente se quitó de encima a varios defensas contrarios, para atrasar para Thomas Partey quien fue tapado por Leglet, salvándose el Barcelona.
Los equipos alinearon así: Barcelona: Ter Stegen, Marc Andre Semedo, Gerard Pike, Clement Lengle, Jordi Alba, Ivan Rakitic, Sergio Busquets, Arturo Vidal, Leonel Messi, Luis Suárez y Riqui Puig... Entraron en la segunda parte a los 63', Sergi Roberto por Rakitic, a los 85, Ansufati por Busquets y Antoine Griezman por Arturo Vidal y, viviendo sus últimos partidos como director técnico del Barcelona, Quique Setién.
Por el Atlético de Madrid, jugaron: Jan Oblak, Santiago Arias, José María Giménez, Felipe Augusto de Almeida, Rennan Lody, Ángel Correa, Thomas Partey, Saúl Ñíguez, Marco Llorente, Diego Costa y Yannikc Carrasco... y en la segunda parte entraron: a los 69 minutos, Joao Félix por Marco Llorente, a los 76, Alvaro Morata sustituyó a Diego Costa, a los 84, Victor Machin Pérez "Vitolo" entro por Ángel Correa, y finalmente, a los 85 Thomas Lemar tomó el lugar del mejor jugador de la tarde, Yannikc Carrasco.
LA PSICOCIBERNÉTICA
El Dr. Maltz en su obra "Psicosibernética" nos dice que su colega el Dr. Edward Miggan llamaó a la Imágen Mental que nos hacemos de nosotros mismos "la potencia más decisiva que poseemos dentro de nuestro ser".
"Este mecanismo -dice Maltz- de creación automática, que existe dentro del ser humano, funciona de una sola manera: debe disponer de un blanco al que disparar.
Como dice Alexis Morrison: El individuo debe ver en su propia mente lo que se propone hacer antes de llevarlo a ejecución a la realidad.
Cuando la persona ve con claridad en su mente lo que se propone, el mecanismo del éxito de características creadoras, que hay dentro de la misma, toma para sí la tarea y la ejecuta mejor que lo que el propio individuo pudiera hacerla mediante la simple fuerza de voluntad o el esfuerzo consciente".
En la consecución de objetivos, nos equivocamos cuando ponemos todo el esfuerzo en hacer lo que nos proponemos y al mismo tiempo nos imaginamos que no podremos lograrlo.
De nada nos sirven los esfuerzos conscientes cuando nuestra imaginación solo ve la derrota. Cuando se enfrentan la voluntad y la imaginación, siempre gana la imagin ación.
"La imaginación es la loca de la casa", dijo Mallebranche, al resumir un capítulo de Santa Teresa en las Moradas de esta poetisa y religiosa.
Y el poeta francés Joubert, escribió "La imaginación es el ojo del alma" y este mismo poeta, también dijo "El que tiene imaginación y no se educa es como el que tiene alas y carece de pies".
La imaginación es la facultad del alma, que representa las imágenes de las cosas reales o ideales; y el acto de imaginar consiste en representarnos idealmente una cosa, crearla en la imaginación.
El objeto de la psicología de la autoimagen no consiste en crear un yo falso, que sea omnipotente, arrogante, egoísta y que concentre en sí la suma de la importancia.
Y esa es la imagen que el Cholo ha creado del Atlético de Madrid, que se está asegurando su participación en Champions League.
