/ domingo 27 de septiembre de 2020

Paradigmas | ¡Faltan líderes que pongan orden!

La Dra. Gro Harlem Brundland hoy a los 81 años copreside la Comisión de Supervisión de la Preparación Mundial (GPMB), organismo autónomo creado por la Organización Mundial de Salud (OMS) y el Banco Mundial. En tiempo pretérito tres veces Primer Ministro de Noruega y exsecretaria de la OMS, encabezó los trabajos para la definición del Desarrollo Sustentable en Río de Janeiro, Brasil, donde editaron el escrito Nuestro Futuro Común o Informe Brundland, tras la búsqueda de un mejor planeta.

El informe 2020 del GPMB titulado “Un mundo en desorden”, hace hincapié en que nunca antes se había advertido tan claramente a los dirigentes mundiales de los peligros de una pandemia devastadora y, sin embargo, no adoptaron las medidas adecuadas, ante la falta de un liderazgo mundial.

Rusia, Estados Unidos y China, junto a farmacéuticas acuerdan con otras naciones el suministro de la inoculación bajo un cheque ventajoso que seguramente cobrarán en la primera oportunidad; mientras, otras naciones inscritas incluida México, en el foro por el 75 aniversario de la Organización de las Naciones Unidas claman porque la vacuna sea “un bien público mundial” respaldando las palabras de Antonio Guterres, secretario general del organismo.

Y todo esto cuando el médico belga Hans Kluge, director para la región europea de la OMS, anunció esta semana presagios desconsoladores al alertar sobre lo que ocurrirá en octubre y noviembre en Europa, acerca de la segunda ola de contagios en que se verá una mortalidad más elevada.

La GPMB a través de la Dra. Brundland asegura que “las inversiones financieras y políticas en la preparación ante el Covid-19 han sido insuficientes y todos estamos pagando el precio". Tal vez refiera al caso Estados Unidos, el mayor donante a la OMS. En abril del presente año y en plena pandemia retiró su aportación de cerca de US$400 millones, el 15% del presupuesto de la organización.

La científica noruega -que salvó su vida en 2011 en el atentado llevado a cabo por Anders Behring Breivik, en la isla de Utoya- sabe que la actitud de los que se hacen llamar líderes mundiales para nada se acerca a lo acordado en la Cumbre de la Tierra de 1992 en el quinto país más grande del mundo, en donde hablaron de la solidaridad, colaboración, para conseguir un mundo mejor en lo social, económico y ambiental. Promesas de antaño, antífrasis presente.

lupitarico@hotmail.com

La Dra. Gro Harlem Brundland hoy a los 81 años copreside la Comisión de Supervisión de la Preparación Mundial (GPMB), organismo autónomo creado por la Organización Mundial de Salud (OMS) y el Banco Mundial. En tiempo pretérito tres veces Primer Ministro de Noruega y exsecretaria de la OMS, encabezó los trabajos para la definición del Desarrollo Sustentable en Río de Janeiro, Brasil, donde editaron el escrito Nuestro Futuro Común o Informe Brundland, tras la búsqueda de un mejor planeta.

El informe 2020 del GPMB titulado “Un mundo en desorden”, hace hincapié en que nunca antes se había advertido tan claramente a los dirigentes mundiales de los peligros de una pandemia devastadora y, sin embargo, no adoptaron las medidas adecuadas, ante la falta de un liderazgo mundial.

Rusia, Estados Unidos y China, junto a farmacéuticas acuerdan con otras naciones el suministro de la inoculación bajo un cheque ventajoso que seguramente cobrarán en la primera oportunidad; mientras, otras naciones inscritas incluida México, en el foro por el 75 aniversario de la Organización de las Naciones Unidas claman porque la vacuna sea “un bien público mundial” respaldando las palabras de Antonio Guterres, secretario general del organismo.

Y todo esto cuando el médico belga Hans Kluge, director para la región europea de la OMS, anunció esta semana presagios desconsoladores al alertar sobre lo que ocurrirá en octubre y noviembre en Europa, acerca de la segunda ola de contagios en que se verá una mortalidad más elevada.

La GPMB a través de la Dra. Brundland asegura que “las inversiones financieras y políticas en la preparación ante el Covid-19 han sido insuficientes y todos estamos pagando el precio". Tal vez refiera al caso Estados Unidos, el mayor donante a la OMS. En abril del presente año y en plena pandemia retiró su aportación de cerca de US$400 millones, el 15% del presupuesto de la organización.

La científica noruega -que salvó su vida en 2011 en el atentado llevado a cabo por Anders Behring Breivik, en la isla de Utoya- sabe que la actitud de los que se hacen llamar líderes mundiales para nada se acerca a lo acordado en la Cumbre de la Tierra de 1992 en el quinto país más grande del mundo, en donde hablaron de la solidaridad, colaboración, para conseguir un mundo mejor en lo social, económico y ambiental. Promesas de antaño, antífrasis presente.

lupitarico@hotmail.com