/ viernes 7 de febrero de 2020

¡De Bien Para Arriba! | Evaluación del desempeño

La gestión de Recursos Humanos (RRHH) se apoya en diversas herramientas para medir el grado de cumplimiento de los objetivos propuestos a nivel individual entre los empleados superiores y subordinados...

Para saber si éstos aportan a la organización: la evaluación al desempeño también aplica en las instituciones del estado y su propósito fundamental es la evaluación de los sistemas y programas a nivel nacional y estatal; entre las instituciones que realizan ésta tarea están la Dirección General de Evaluación del Desempeño de la Secretaria de Salud, el Sistema de Evaluación del Desempeño (SED) de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, el Sistema de Evaluación del Desempeño, la de los Servidores Públicos de Carrera, entre otros.

La evaluación del desempeño individual por competencias se ha convertido en una necesidad para las organizaciones que buscan la mejora continua y la efectividad, su desarrollo cumple etapas importantes: primeramente la planeación del desempeño en donde se debe identificar los objetivos y resultados a cumplir en el ejercicio, así como las condiciones necesarias para su desarrollo, considerando las habilidades, destrezas, actividades y conocimientos, motivando en el empleado la innovación y creatividad, del mismo modo encontrando las áreas de oportunidad en entrenamiento, capacitación y desarrollo para que el empleado tenga éxito en su desempeño.

La evaluación del desempeño debe utilizar un sistema para evaluar conforme a la función y el área de trabajo, calificando la conducta laboral, así como las habilidades y destrezas del empleado. Dicho sistema deberá definir los factores a evaluar y asignar un porcentaje de calificación con acuerdo a la jerarquía de factores como: la puntualidad, la asistencia, el empleo de herramientas, el trabajo en equipo, el manejo de las relaciones interpersonales (con compañeros y con clientes). La eficiencia debe reflejarse en la operación oportuna, tomando en cuenta la seguridad y la salud ocupacional; el éxito de la evaluación depende tanto del empleado como del jefe inmediato, pues deben trabajar en la evaluación con anticipación, conocer los aspectos a evaluar, involucrarse en el desarrollo, llevar a cabo las acciones positivas sobre el desempeño y las funciones, procurar el diálogo y escuchar propuestas y planteamientos. Todo el proceso de evaluación requiere diálogo constructivo, participación, objetividad, observación, apertura y sobre todo honestidad.

La evaluación del desempeño se practica más fácilmente en las empresas que tienen identificadas las competencias de cada uno de sus empleados, que consideran el mejoramiento del servicio y el desarrollo organizacional. Desde la segunda mitad del siglo pasado, en la llamada “sociedad del conocimiento” (término acuñado por primera vez por Peter Drucker), la medición del rendimiento de los trabajadores empezó a considerar la gestión del talento, así como las competencias basadas en objetivos. Considerando los nuevos desafíos que intensifican el desempeño laboral, así como los cambios en las características y los modelos de evaluación, las organizaciones deben plantear un modelo que incentive la calidad, la confiabilidad, la objetividad y la veracidad, respetando el derecho de los empleados a opinar y participar. La organización deberá incluir como parte fundamental de la evaluación del desempeño, un plan de acciones aplicables para todo el equipo de trabajo, propiciando los ajustes en el comportamiento y desempeño en la búsqueda de resultados encaminados a la mejora continua.

Mientras tanto, recuerda que todo está previsto para que tengas un día ¡de bien para arriba!

La gestión de Recursos Humanos (RRHH) se apoya en diversas herramientas para medir el grado de cumplimiento de los objetivos propuestos a nivel individual entre los empleados superiores y subordinados...

Para saber si éstos aportan a la organización: la evaluación al desempeño también aplica en las instituciones del estado y su propósito fundamental es la evaluación de los sistemas y programas a nivel nacional y estatal; entre las instituciones que realizan ésta tarea están la Dirección General de Evaluación del Desempeño de la Secretaria de Salud, el Sistema de Evaluación del Desempeño (SED) de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, el Sistema de Evaluación del Desempeño, la de los Servidores Públicos de Carrera, entre otros.

La evaluación del desempeño individual por competencias se ha convertido en una necesidad para las organizaciones que buscan la mejora continua y la efectividad, su desarrollo cumple etapas importantes: primeramente la planeación del desempeño en donde se debe identificar los objetivos y resultados a cumplir en el ejercicio, así como las condiciones necesarias para su desarrollo, considerando las habilidades, destrezas, actividades y conocimientos, motivando en el empleado la innovación y creatividad, del mismo modo encontrando las áreas de oportunidad en entrenamiento, capacitación y desarrollo para que el empleado tenga éxito en su desempeño.

La evaluación del desempeño debe utilizar un sistema para evaluar conforme a la función y el área de trabajo, calificando la conducta laboral, así como las habilidades y destrezas del empleado. Dicho sistema deberá definir los factores a evaluar y asignar un porcentaje de calificación con acuerdo a la jerarquía de factores como: la puntualidad, la asistencia, el empleo de herramientas, el trabajo en equipo, el manejo de las relaciones interpersonales (con compañeros y con clientes). La eficiencia debe reflejarse en la operación oportuna, tomando en cuenta la seguridad y la salud ocupacional; el éxito de la evaluación depende tanto del empleado como del jefe inmediato, pues deben trabajar en la evaluación con anticipación, conocer los aspectos a evaluar, involucrarse en el desarrollo, llevar a cabo las acciones positivas sobre el desempeño y las funciones, procurar el diálogo y escuchar propuestas y planteamientos. Todo el proceso de evaluación requiere diálogo constructivo, participación, objetividad, observación, apertura y sobre todo honestidad.

La evaluación del desempeño se practica más fácilmente en las empresas que tienen identificadas las competencias de cada uno de sus empleados, que consideran el mejoramiento del servicio y el desarrollo organizacional. Desde la segunda mitad del siglo pasado, en la llamada “sociedad del conocimiento” (término acuñado por primera vez por Peter Drucker), la medición del rendimiento de los trabajadores empezó a considerar la gestión del talento, así como las competencias basadas en objetivos. Considerando los nuevos desafíos que intensifican el desempeño laboral, así como los cambios en las características y los modelos de evaluación, las organizaciones deben plantear un modelo que incentive la calidad, la confiabilidad, la objetividad y la veracidad, respetando el derecho de los empleados a opinar y participar. La organización deberá incluir como parte fundamental de la evaluación del desempeño, un plan de acciones aplicables para todo el equipo de trabajo, propiciando los ajustes en el comportamiento y desempeño en la búsqueda de resultados encaminados a la mejora continua.

Mientras tanto, recuerda que todo está previsto para que tengas un día ¡de bien para arriba!