/ sábado 16 de marzo de 2024

Gryta.com, Fylosofía en expresión / Un nuevo amanecer

Un día me cansé de luchar.

Me di cuenta de que no era perfecto ni tenía por qué serlo.

Que de alguna manera había permitido que mis errores me llevaran sin darme cuenta al fondo de un pozo tan oscuro en el que además de sentirme solo, creía que no había ningún remedio y que debía quedarme ahí, derrumbado para siempre.

Una y otra vez veía mis fracasos, mis equivocaciones y aquello de lo que me arrepentía y me laceraba con frases hirientes y pensamientos nocivos, autodestructivos.

Me decía con furia, "nunca saldrás de aquí, jamás lo lograrás, siempre serás la vergüenza de los tuyos, no de la gente, no del mundo, no de la sociedad, pero sí de los que más amas".

¿Por qué?

Pues por haber tomado malas decisiones, por ser un joven inexperto y no saber cómo enfrentar la vida, por haber nacido soñador y además tener un concepto de la realidad que simplemente en un principio no había sido funcional.

Por haber buscado en el alcohol la escapatoria de la hiriente realidad que me torturaba para descubrir al final que no estaba más que construyendo mi propia desventura, dañándome a mí mismo y a los demás, que con el tiempo acabaría por perder el control de mi vida y además vivir el rechazo de aquellos que, no moralmente quizás, sino por conveniencia, les pareció buena idea tratar de segregarme.

Pero también por interesarme en lo que casi nadie se interesa, por querer ser artista, filósofo, compositor, escritor y poeta, entre otras particularidades profesionales, actividades a las que en mi juventud no me dieron permiso; así mismo, por no estar de acuerdo con compartir mi vida, mi casa, mis puertas, mis perros y mis significados con media humanidad sin que jamás me pidieran mi consentimiento.

Por eso y algunas cosas más.

Pero al final, ¿quién es perfecto?

Descubrí que algunos de aquellos que me censuraban no eran ningún ejemplo a seguir y que incluso varios se habían beneficiado con mis equivocaciones.

Así que decidí pedir perdón, pero al mismo tiempo dejar el papel de víctima.

Hacer cambios, enmiendas en lo posible y confiar en mí.

Renuncié al amor fingido, al de compromiso y a la hipocresía de un grupo humano que no tiene mi esencia ni me identifico con ellos ni con ellas.

Admití que había personas que jamás querrían volver a tratar conmigo, que la reconciliación sería imposible y que en ciertos casos sería yo quien jamás querría volver a interactuar con algunos, pero intenté y me esforcé en lograr suprimir el odio, el resentimiento y la mala voluntad.

Así fue como empecé de nuevo, quité de mi vida lo que no me sirve, además de "hacer" cosas nuevas, "dejé de hacer" lo que me lastimaba o lastimaba a otros, cancelé conductas autodestructivas, dejé las relaciones tóxicas, me alejé de muchos y me acerqué a mí mismo.

Encontré en el silencio, la sencillez, el estudio, la filosofía, la magia, la terapia ancestral, la disciplina, la espiritualidad, la alimentación saludable, la oración, el yoga y en la elevación del lenguaje, la paz que tanto anhelaba y el principio del cambio existencial.

Por eso en carne propia debo decirte a ti que me lees y que posiblemente estás en desgracia o piensas que tu vida no tiene sentido y que jamás lograrás levantarte, que no te rindas, que no desmayes y que no se turbe tu corazón, porque siempre habrá un nuevo amanecer y un especial favor de la vida para "los renglones torcidos de Dios".

Deseo que la Luz sea en tu vida, lucha, esfuérzate y si no puedes pide ayuda.

gryitafuerte@gmail.com

fb: Gryita Fuerte

RE-GENERACIÓN 19

Un día me cansé de luchar.

Me di cuenta de que no era perfecto ni tenía por qué serlo.

Que de alguna manera había permitido que mis errores me llevaran sin darme cuenta al fondo de un pozo tan oscuro en el que además de sentirme solo, creía que no había ningún remedio y que debía quedarme ahí, derrumbado para siempre.

Una y otra vez veía mis fracasos, mis equivocaciones y aquello de lo que me arrepentía y me laceraba con frases hirientes y pensamientos nocivos, autodestructivos.

Me decía con furia, "nunca saldrás de aquí, jamás lo lograrás, siempre serás la vergüenza de los tuyos, no de la gente, no del mundo, no de la sociedad, pero sí de los que más amas".

¿Por qué?

Pues por haber tomado malas decisiones, por ser un joven inexperto y no saber cómo enfrentar la vida, por haber nacido soñador y además tener un concepto de la realidad que simplemente en un principio no había sido funcional.

Por haber buscado en el alcohol la escapatoria de la hiriente realidad que me torturaba para descubrir al final que no estaba más que construyendo mi propia desventura, dañándome a mí mismo y a los demás, que con el tiempo acabaría por perder el control de mi vida y además vivir el rechazo de aquellos que, no moralmente quizás, sino por conveniencia, les pareció buena idea tratar de segregarme.

Pero también por interesarme en lo que casi nadie se interesa, por querer ser artista, filósofo, compositor, escritor y poeta, entre otras particularidades profesionales, actividades a las que en mi juventud no me dieron permiso; así mismo, por no estar de acuerdo con compartir mi vida, mi casa, mis puertas, mis perros y mis significados con media humanidad sin que jamás me pidieran mi consentimiento.

Por eso y algunas cosas más.

Pero al final, ¿quién es perfecto?

Descubrí que algunos de aquellos que me censuraban no eran ningún ejemplo a seguir y que incluso varios se habían beneficiado con mis equivocaciones.

Así que decidí pedir perdón, pero al mismo tiempo dejar el papel de víctima.

Hacer cambios, enmiendas en lo posible y confiar en mí.

Renuncié al amor fingido, al de compromiso y a la hipocresía de un grupo humano que no tiene mi esencia ni me identifico con ellos ni con ellas.

Admití que había personas que jamás querrían volver a tratar conmigo, que la reconciliación sería imposible y que en ciertos casos sería yo quien jamás querría volver a interactuar con algunos, pero intenté y me esforcé en lograr suprimir el odio, el resentimiento y la mala voluntad.

Así fue como empecé de nuevo, quité de mi vida lo que no me sirve, además de "hacer" cosas nuevas, "dejé de hacer" lo que me lastimaba o lastimaba a otros, cancelé conductas autodestructivas, dejé las relaciones tóxicas, me alejé de muchos y me acerqué a mí mismo.

Encontré en el silencio, la sencillez, el estudio, la filosofía, la magia, la terapia ancestral, la disciplina, la espiritualidad, la alimentación saludable, la oración, el yoga y en la elevación del lenguaje, la paz que tanto anhelaba y el principio del cambio existencial.

Por eso en carne propia debo decirte a ti que me lees y que posiblemente estás en desgracia o piensas que tu vida no tiene sentido y que jamás lograrás levantarte, que no te rindas, que no desmayes y que no se turbe tu corazón, porque siempre habrá un nuevo amanecer y un especial favor de la vida para "los renglones torcidos de Dios".

Deseo que la Luz sea en tu vida, lucha, esfuérzate y si no puedes pide ayuda.

gryitafuerte@gmail.com

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RE-GENERACIÓN 19