Mrs. Rose E. Grant hablaba un inglés perfecto con una pronunciación impecable ya que había nacido en la Isla Caribeña de Barbados cuando era colonia del Reino Unido.
El destino la trajo a radicar a Tampico. En 1914 época de oro para el Puerto, Mrs. Grant empezó con mucho éxito a dar clases particulares de inglés. Su hijo, José B. Grant nació en Tampico en 1906 pero hizo sus estudios en Estados Unidos. En 1940 fue nombrado Director de la Escuela de Enseñanzas Especiales Luz y Fuerza del Sindicato de la Compañía Eléctrica de Tampico, hoy CFE. En 1952 inicia su propia escuela de inglés en la Calle Tamaulipas, frente a la Cruz Roja.
Su nieto José B. Grant Ortiz fue enviado estudiar a los Estados Unidos y a su regreso se incorporó al negocio familiar. En 1959 se inauguró el edificio de la Grant English School en la Ave. Hidalgo.
El profesor Grant será siempre recordado como un maestro excepcional cuyo método de aprendizaje era infalible. Siempre aconsejaba dejar el miedo a un lado y comenzar a hablar repitiendo las palabras que ya conocían y tratar de darles sentido y sobre todo confiar y perder el temor a equivocarse. Practicar y enriquecer el vocabulario para llegar a expresarse con fluidez y buena pronunciación. Leer en voz alta, escuchar canciones en inglés e intentar cantarlas detallando la pronunciación.
Fue un maestro que siempre se distinguió por su pulcritud y manera elegante de vestir. Correcto de maneras y educado en su trato enalteciendo con sus enseñanzas y vida ejemplar, los valores y principios que tanto sirven para formar hombres y mujeres de bien. Hombre culto y preparado era un buen músico lírico y compositor. Tocaba el piano y el banjo de “oído” y compuso varias canciones para el aprendizaje del inglés, entre ellas el himno de la escuela que lo alumnos cantaban quince minutos antes de salir de clase.
Muchos tampiqueños que estudiaron y aprendieron el idioma inglés aún recuerdan con gran cariño y reconocimiento a una escuela que dejó una huella imborrable en la vida del Tampico de aquellos años. Mr. José B. Grant se jubila después de treinta años dedicado a la enseñanza y se retira de la escuela en 1975 dejándola en manos de su familia. Fallece en 1990 dejando un recuerdo imborrable de un gran PROFESOR Y CABALLERO.
