/ martes 23 de marzo de 2021

Economía para todos | Decisión difícil para Banxico

El próximo jueves, la Junta de Gobierno del Banco de México decidirá si ajusta o no la tasa de interés que actualmente yace en los 4 puntos porcentuales.

Durante febrero, el repunte de los precios de los energéticos junto con una depreciación del tipo de cambio, hicieron que tuviera efectos en la inflación para repuntar a 3.76 por ciento, de tal manera que llegó a ser la más alta desde octubre pasado. Asimismo, la variación mensual registrada en febrero fue la más alta en los últimos 20 años para ese mismo mes, colocándose en 0.63 por ciento.

Por otra parte, este miércoles, el Inegi publicará la inflación para la primera quincena de marzo; la cual será de suma importancia para que Banco de México tome su decisión al siguiente día. Y es que, con las presiones inflacionarias recientes, Banco de México está en una disyuntiva en cuanto a su postura en política monetaria.

A finales del año pasado, con el aligeramiento de restricciones sanitarias y celebraciones decembrinas, hubo cierto repunte de casos que hicieron que se recrudeciera un tanto la recuperación que se venía mostrando en los meses posteriores al cierre económico a mediados de año y que se registraran tasas de inflación estables, esto “aligeró” la decisión del Banco Central de mantener su tasa de interés en 4.25 por ciento durante finales de año.

No obstante, a principios de febrero, Banco de México recortó su tasa de interés en 25 puntos base para colocarla en 4 por ciento, esto derivado de las constantes bajas a la inflación que se presentaron hacia finales de año. Sin embargo, con los estímulos presentados y aprobados por el Gobierno de Estados Unidos, los mercados financieros auspiciaron un importante repunte en la inflación de aquel país a consecuencia de la fuerte inyección de dinero para los estadounidenses, lo cual generó una serie de circunstancias que repercutieron en el tipo de cambio.

Además, los precios internacionales del petróleo han estado incrementándose desde el desplome del año pasado a precios negativos, lo que ha repercutido indudablemente en los precios de los energéticos en nuestro país, llegando a observarse precios máximos en algunas partes de la nación, lo cual, tiene una incidencia importante en la inflación.

Por lo que este próximo jueves, la Junta de Gobierno del Banco de México deberá tomar una decisión difícil entre seguir bajando la tasa de interés con la posible repercusión que traería en una latente alza a la inflación, o subir la tasa para tratar de mantener estable el poder adquisitivo de la población mexicana como lo marca el Artículo 2° de la Ley del Banco de México, esto con una probable afectación en la ya de por sí recuperación económica tan mesurada que se ha venido observando. Por otra parte, también tendrá la opción de mantenerla como está vigente en espera de que seguir observando cómo se comporta la inflación y el crecimiento en los próximos meses hasta su próxima decisión el 13 de mayo. Mientras tanto, el próximo miércoles será crucial cuando se publiquen los resultados de la inflación de la primera quincena de marzo, lo cual ayudará al “banco de bancos” a tomar su decisión con mayor certeza. Cuídese mucho.

Regeneración 19

El próximo jueves, la Junta de Gobierno del Banco de México decidirá si ajusta o no la tasa de interés que actualmente yace en los 4 puntos porcentuales.

Durante febrero, el repunte de los precios de los energéticos junto con una depreciación del tipo de cambio, hicieron que tuviera efectos en la inflación para repuntar a 3.76 por ciento, de tal manera que llegó a ser la más alta desde octubre pasado. Asimismo, la variación mensual registrada en febrero fue la más alta en los últimos 20 años para ese mismo mes, colocándose en 0.63 por ciento.

Por otra parte, este miércoles, el Inegi publicará la inflación para la primera quincena de marzo; la cual será de suma importancia para que Banco de México tome su decisión al siguiente día. Y es que, con las presiones inflacionarias recientes, Banco de México está en una disyuntiva en cuanto a su postura en política monetaria.

A finales del año pasado, con el aligeramiento de restricciones sanitarias y celebraciones decembrinas, hubo cierto repunte de casos que hicieron que se recrudeciera un tanto la recuperación que se venía mostrando en los meses posteriores al cierre económico a mediados de año y que se registraran tasas de inflación estables, esto “aligeró” la decisión del Banco Central de mantener su tasa de interés en 4.25 por ciento durante finales de año.

No obstante, a principios de febrero, Banco de México recortó su tasa de interés en 25 puntos base para colocarla en 4 por ciento, esto derivado de las constantes bajas a la inflación que se presentaron hacia finales de año. Sin embargo, con los estímulos presentados y aprobados por el Gobierno de Estados Unidos, los mercados financieros auspiciaron un importante repunte en la inflación de aquel país a consecuencia de la fuerte inyección de dinero para los estadounidenses, lo cual generó una serie de circunstancias que repercutieron en el tipo de cambio.

Además, los precios internacionales del petróleo han estado incrementándose desde el desplome del año pasado a precios negativos, lo que ha repercutido indudablemente en los precios de los energéticos en nuestro país, llegando a observarse precios máximos en algunas partes de la nación, lo cual, tiene una incidencia importante en la inflación.

Por lo que este próximo jueves, la Junta de Gobierno del Banco de México deberá tomar una decisión difícil entre seguir bajando la tasa de interés con la posible repercusión que traería en una latente alza a la inflación, o subir la tasa para tratar de mantener estable el poder adquisitivo de la población mexicana como lo marca el Artículo 2° de la Ley del Banco de México, esto con una probable afectación en la ya de por sí recuperación económica tan mesurada que se ha venido observando. Por otra parte, también tendrá la opción de mantenerla como está vigente en espera de que seguir observando cómo se comporta la inflación y el crecimiento en los próximos meses hasta su próxima decisión el 13 de mayo. Mientras tanto, el próximo miércoles será crucial cuando se publiquen los resultados de la inflación de la primera quincena de marzo, lo cual ayudará al “banco de bancos” a tomar su decisión con mayor certeza. Cuídese mucho.

Regeneración 19